Este territorio está formado por Malta, Gozo y Comino, las únicas islas habitadas del archipiélago, aunque las acompañan pequeños islotes de belleza espléndida.
Su litoral es un auténtico espectáculo visual bañado por las cristalinas aguas del mar Mediterráneo. A lo largo de la costa encontraremos tanto calitas de roca como playas de arena ideales para zambullirnos en ellas, ya sea para refrescarnos, hacer snorkel o submarinismo. De hecho, se dice que el fondo marino de este enclave es una auténtica reliquia, pues en su interior descansan joyas como el HMS Maori, barco que sirvió a la flota mediterránea del Reino Unido en la II Guerra Mundial y que se hundió tras un bombardeo en el año 1942. En total son 68 las localidades que forman parte de este país, siendo su capital La Valeta, situada en la isla de Malta. Este destino es muy popular entre los turistas debido a su clima cálido, pero también tiene un patrimonio arquitectónico e histórico de lo más interesante, entre el cual destacan tres lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: los Templos Megalíticos, La Valeta y el Hipogeo de Hal Saflieni. Su estratégica posición geográfica ha sido motivo de disputas por parte de diversas potencias a lo largo de los siglos, como los árabes, franceses e ingleses, entre otros. Esas culturas han quedado reflejadas en las costumbres de sus lugareños, en su lengua y en su gastronomía. Una fusión que bien vale la pena conocer en primera persona. ¿Nos vamos?