Tu recorrido por los museos de Turquía debe comenzar por Estambul, la ciudad más representativa e intensa del país.
Allí vas a encontrar de todo, desde la excelencia de sus exposiciones arqueológicas hasta las mejores muestras de arte contemporáneo. El que no te puedes perder por nada del mundo es el triple edificio de Gülhane, donde hallarás el Museo Arqueológico, el Museo del Antiguo Oriente y el Pabellón de los Azulejos. Otra de las escalas fundamentales en tu ruta es el Museo de las Civilizaciones Anatolias de Ankara. Sin duda, es uno de los grandes motivos por los que visitar la capital oficial del país. De hecho, si quieres entender el complejo e intenso pasado de Turquía, es el mejor lugar para comenzar. Recorre un mercado cubierto siguiendo un recorrido en espiral que te llevará desde la Prehistoria hasta la Grecia y Roma clásicas.
Para completar tu recorrido museístico, sólo tienes que buscar en la ciudad que visites. Por Turquía han pasado tantas civilizaciones que cualquier localidad tiene una exposición sobre su larga historia. Prueba con el Museo de la Arqueología Submarina de Bodrum, el Museo del Mosaico Gaziantep Zeugma o el museo situado en el Parque Histórico Nacional de Galípoli. Y para acabar, nada mejor que regresar a Estambul y pasear por su gran museo ‘a su manera’, es decir, el Gran Bazar. Bienvenido a la sucesión de tiendas y puestos más grande que te puedas imaginar. Allí vas a encontrar de todo y le puedes dedicar todo el tiempo que desees. Prepárate para bucear por callejuelas, beber mucho té y regatear a la búsqueda de los mejores precios.