Las playas de Puerto Plata tienen el poder de hechizar a todo aquel que respira su brisa marina. Kilómetros de arena blanca que acogen a un viajero ilusionado y activo que por el día disfruta de sus bellas y salvajes playas bronceando su cuerpo relajado en la toalla o realizando actividades acuáticas; cuando el sol se pone se mimetiza con sus gentes y baila hasta el amanecer. Quizá algo tenga que ver que sea la cuna del Ron Brugal.
Quizá si pensamos en República Dominicana nos venga a la mente Punta Cana. Pues bien, es hora de resetear. En Puerto Plana la paleta de sus aguas pasará del turquesa a un verdoso con una arena fina rodeada de cocoteros y verde flora. Un aire más salvaje envuelve a esta parte de la costa caribeña donde lujosos resorts conviven a la perfección con alojamientos más económicos. Turismo familiar, de parejas pero también de amigos y aquellos que buscan combinar sol con actividades acuáticas y la esencia de sus gentes.
Si buscas remansos de paz y romanticismo Playa Dorada será la mejor de las opciones; diversión y contacto con el mundo animal, Cofresí; la naturaleza más salvaje la encontrarás en Playa Ensenada mientras que la mejor de las olas en Puerto Encuentro, así como un cálido ocio nocturno con una clara esencia local. Otras maravillas de la naturaleza que encandilarán serán Cayo Arena, playa Cambiazo o la paradisíaca Sosúa.