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Phuket

La postal más idílica de Tailandia

En el extremo sur de Tailandia y conectada con el continente por el puente de Sarasin, se encuentra la isla de Phuket, la más grande del país. Su principal atractivo y reclamo son sus playas, de aguas cristalinas y arena blanca, y en ella es donde se encuentran las principales postales de la Tailandia más relajada y paradisiaca.

Además, la isla es famosa por su ocio nocturno, concentrado en la zona de Patong Beach. Como su nombre indica, se trata de un enclave de playa, en la costa oeste del país y posicionado como su mayor núcleo turístico. En ella se encuentra una de las playas más conocidas de Tailandia, con una extensión de más de tres kilómetros de arena blanca. En este punto nos encontraremos con numerosas tiendas, coquetos restaurantes en los que degustar la tradicional comida thai y una concurrida oferta de ocio nocturno. Ésta tiene su epicentro en Bangla Road, una calle peatonal con una gran concentración de clubes, discotecas y bares de chicas y ladyboys. Patong es una de las playas más visitadas junto a la de Karon Beach, algo más tranquila y con zonas para practicar deportes acuáticos. Entre las menos concurridos, pero igual de recomendables están la playa de Kamala Beach, la de Kata Noi o Surin Beach. Los amantes del buceo encontrarán en Phuket un destino ideal, pues cuenta con rico fondo marino de gran diversidad vida marina. Buceo, snorkel o submarinismo, son algunas de las principales actividades que se pueden llevar a cabo en el Mar de Andaman. ¿Quién se anima a sumergirse en sus aguas? La oferta cultural de Phuket tiene un gran protagonista: el Gran Buda. Una estatua de aproximadamente unos 45 metros de alto esculpida en mármol blanco en una colina del monte Nakkerd. Es el principal símbolo de la isla y desde su ubicación pueden observarse unas asombrosas vistas panorámicas de la isla. La parte espiritual se encuentra representada en el templo de Wat Chalong, el más grande de Phuket. Con una pagoda principal de 60 metros de altura. En este colorido templo budista podremos vivir además una enriquecedora experiencia cultural, pues podremos contemplar en vivo y en directo el rezo de los monjes.