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Construcciones que marcaron tendencia

Edificios locales característicos

Al pensar en Nueva York a todos nos asoman recuerdos de imágenes que hemos visto en la gran pantalla, y, en la mayoría de ellas, aparecen algunos de sus edificios más característicos. La familiaridad de este hecho provoca en el viajero las ganas de pisar con sus propios pies esos lugares y poder entremezclarse entre el bullicioso ambiente de la ciudad para conocer cada tramo de la popular urbe estadounidense.

Perdernos en la jungla urbana de la Gran Manzana no será un problema, ya que en cada rincón asoman lugares únicos con historias increíbles. El pasado de la sociedad de la ciudad ha forjado a fuego el carácter único de sus actuales habitantes, que se entremezclan entre los recién llegados y siguen persiguiendo el sueño americano. Entre todos estos locales, los viajeros se desplazan hasta aquí para ser testigos de los atractivos de esta gran metrópoli. De entre todos sus rascacielos y otros edificios no podemos perdernos una detallada visita a elementos tan característicos como el Puente de Brooklyn, el edificio Flatiron, la Biblioteca Pública, la Catedral de San Patricio o la Grand Central Terminal.

El interés urbano de Nueva York

Puente de Brooklyn

Nadie suele abandonar Nueva York sin cruzar el famoso puente que une Manhattan y Brooklyn. El maravilloso coloso colgante lleva en pie desde 1883, siendo el más grande de su categoría cuando se inauguró. Sea cual sea nuestra ubicación en la ciudad debemos recorrer la plataforma lateral del puente y cruzar el río Hudson para observar de cerca la maravillosa arquitectura neogótica que caracteriza la construcción. Se tarda aproximadamente entre 25 y 50 minutos en recorrer andando los 1.825 metros que unen los dos distritos de ambas orillas del río, dependiendo del ritmo que llevemos y las paradas para sacar fotos que realicemos. Desde aquí se puede admirar la belleza del skyline de Manhattan y el contraste con el Brooklyn más cercano al río. Es común combinar la visita al puente con una hermosa caminata por el Brooklyn Bridge Park o descubriendo los barrios más característicos del distrito de Brooklyn.

Edificio Flatiron

Siguiendo en ruta por los edificios más populares de Nueva York debemos detenernos para observar el mítico Flatiron. Puede que por el nombre no nos venga a la cabeza el edificio de forma triangular con uno de sus ángulos tan fino que parece que no quepa ni una sola persona en su interior, pero nada más verlo reconoceremos este rascacielos, que fue uno de los más altos de la ciudad en su construcción en el año 1902. Con sus 22 pisos de altura, este edificio fue llamado Fuller en honor a su promotor, pero pronto fue conocido con el actual nombre debido a su similitud con la forma de una plancha (iron en inglés). La Calle 23 y el cruce entre la Quinta Avenida y Broadway delimitan la manzana de este edificio, del cual se sacan miles de panorámicas al día desde su flanco más estrecho. La belleza arquitectónica de la construcción se plasma también en sus paredes, no solamente en su forma, ya que en todos sus costados el triángulo tiene frisos decorados con relieves que recuerdan a elementos renacentistas.

Catedral de San Patricio

Esta impresionante construcción religiosa es la más grande de América del Norte de estilo neogótico. El templo está dedicado a San Patricio, patrón de los irlandeses, ya que esta importante comunidad colaboró con la elaboración del templo mediante donativos. Como en muchos de los edificios de Nueva York la altura tenía una importancia crucial, pretendían que sus agujas fueran el punto más alto de la ciudad y se apreciaran desde varios ángulos, por eso con sus 101 metros de alto fue la edificación más elevada del lugar cuando se terminó. Además de su belleza exterior se puede admirar, en el interior, la preciosidad de sus dos órganos con cerca de 4.000 tubos. Marca la diferencia con otros templos religiosos de la zona, y el bello rosetón que parece mágico cuando el sol refleja sus cristales coloridos en el interior no tiene nada que envidiar a las más puras catedrales góticas europeas.

Grand Central Terminal

En Nueva York hay edificios característicos de todas las tipologías y usos imaginables. La belleza de la estación terminal del Midtown de Manhattan es el claro ejemplo de ello. Sus grandes bóvedas de ladrillo y sus inmensos ventanales le otorgan una hermosura que no está reñida con su funcionalidad. Con 67 vías y 44 andenes es la más grande del mundo, y está prevista aún la apertura de otra ampliación subterránea más. La experiencia en esta estación puede completarse con la oferta gastronómica y de compras que ofrece este lugar, además de un amplio abanico de ofertas culturales que se llevan a cabo durante todo el año.

Biblioteca Pública

La importancia de esta edificación es tanto arquitectónica como histórica y cultural. Es una construcción levantada al detalle tanto en su parte exterior como interior. El estilo neoclásico del edificio está flanqueado por dos leones que presiden su entrada. Las escalinatas exteriores son muy conocidas debido a su aparición en varios films de relevante importancia. En su interior guarda más de 3 millones de ejemplares en uno de los fondos más grandes del continente americano y del mundo. La estancia más emblemática es la Rose Main Reading Room, donde el silencio del lugar permite abstraerse del mundo exterior y su decoración con las inmensas lámparas colgantes y las robustas sillas y mesas de roble transportan al visitante directamente a otra época. Es bueno saber que el lugar ofrece conexión gratuita a internet, cosa que lo convierte en el sitio ideal para sentarse a consultar cualquier información pertinente a nuestro viaje neoyorquino.

Museo Americano de Historia Natural

Este museo se sitúa en unos terrenos en frente del Central Park y consta de un total de 27 edificios. En la entrada aguarda el esqueleto de dinosaurio que se ha hecho famoso por varias películas y series americanas, pero lo realmente interesante son sus 46 salas que acogen las exposiciones permanentes abiertas al público y los laboratorios de investigación en los cuales trabajan más de 200 personas a tiempo completo. En el museo podremos conocer el origen de la vida en la tierra y comprobar la evolución de la misma a través de los fósiles, esqueletos, rocas y animales embalsamados. El mayor atractivo son las plantas dedicadas a los dinosaurios, sobre todo si se viaja con niños. El museo contiene también un IMAX con interesantes proyecciones y un planetario.