Situado muy cerca de la frontera con Lituania, rodeado de árboles y flanqueado por un bonito estanque, el palacio barroco de Rundale es uno de esos lugares sin los que un viaje a Letonia estaría incompleto.
La construcción de este imponente palacio se inició en 1736 para que fuera residencia de verano de Ernst Johann von Biron, duque de Curlandia. Sin embargo, no pudo terminarse hasta 1768, cuando el duque volvió de su exilio en Siberia. En este palacio han residido diferentes familias a lo largo de la historia y ha sido utilizado como cuartel, hospital, o escuela. A día de hoy, Rundale es un museo en el que podremos admirar el lujo y la opulencia de los Duques de Curlandia, paseando por sus imponentes salas, dejándonos llevar por el encanto de uno de los lugares más impresionantes de las repúblicas bálticas. Cada habitación es un mundo nuevo, con colores y ambientes distintos que permiten disfrutar de esta espectacular obra maestra: el salón Dorado, sala del trono del duque; la sala de la porcelana, donde se exponen exquisitas piezas de porcelana oriental; la sala holandesa, con impresionantes lienzos de artistas neerlandeses, entre los que destaca Rembrandt; la habitación de los gobernantes, con cuadros que representan a antiguos duques de Curlandia; el dormitorio del duque, con una enorme cama en el centro; la sala de billar o el salón de mármol, que fue el comedor del duque, así como las habitaciones privadas de la duquesa, (el dormitorio y el baño). Al Palacio de Rundale también se le conoce como el “Versalles de Letonia”, ya que tiene unos impresionantes jardines barrocos, diseñados según el estilo de Versalles. Paseando por este agradable parque, se puede admirar la impresionante fachada del palacio, rodeado de más de dos mil variedades de flores y árboles. Lo mismo que el propio palacio, los jardines de Rundale tienen diferentes ambientes: el parterre simétrico, rematado con una fuente central; el jardín de las rosas, con centenares de estas flores, entre ellas, hasta 600 variedades de rosas históricas; un teatro con pequeñas terrazas de hierba; un pequeño bosque, así como pérgolas y diferentes pabellones.