Dicen que es la Perla del Estrecho y lo cierto es que Helsinborg está situada en un lugar impresionante, a orillas del Öresund y a un paso de la costa danesa. Con esta localización tan estratégica, no es de extrañar que la ciudad haya tenido una historia de lo más movida.
Gracias a eso, querido viajero, Helsinborg tiene mucho que contarte, desde la torre de Kärnan -que es todo lo que queda de la fortaleza del siglo XII- hasta la torre de ladrillo del ayuntamiento, pasando por la casa de madera de Jacob Hansen –la más antigua de la ciudad, levantada en 1641- o la moderna Dunkers Kulturhus, que acoge un centro cultural muy interesante. Vasteras también presume de ubicación idílica. La quinta ciudad más poblada de Suecia se levanta desde hace siglos a orillas del lago Mälaren, justo en el punto donde desemboca el río Svartan. Gracias a ello, Vasteras ha sido un importante centro comercial desde la época de los vikingos. Desde hace décadas, es también un importante núcleo industrial y se ha ganado una merecida fama de ciudad volcada con la cultura. De hecho, es conocida como la capital sueca del jazz. Pero además de ello, Vasteras cuenta con numerosos monumentos que visitar, como el castillo o la catedral. El siguiente punto de tu ruta por las ciudades suecas es Örebro, considerada como la localidad más organizada y elegante del país. ¿Quieres saber por qué? Resulta que en 1854 un devastador incendio arrasó casi todos los edificios, así que se desarrolló un racional proyecto urbanístico a ambas orillas del río Svartan. Por eso hoy encuentras una perfecta mezcla de distinguidos edificios con el castillo, que aguanta firme desde el siglo XIII, y la iglesia de San Nicolás, que data de la misma época, aunque ha sufrido numerosas restauraciones. En el centro de la llanura de Östgöta se levanta Linköping, una ciudad catedralicia que, desde hace décadas, se ha especializado en la industria aeronáutica. Así pues, sus principales atractivos se pueden clasificar en dos grupos, uno clásico y otro moderno. En el primero, no te pierdas, la Domkyrkan, la espectacular catedral levantada en el siglo XIII; la Universidad o el museo al aire libre del casco antiguo, Gamla Linköping, con unos 80 edificios de madera localizados en calles empedradas y con varios elegantes jardines. En la parte moderna, no te pierdas el Museo Sueco del Ejército del Aire, entre otros lugares de interés.