El pasado de la isla está presente a través de diferentes manifestaciones, desde el carácter de sus gentes hasta los recetarios gastronómicos. Pero si hay una expresión que simboliza el sentir de la isla, esa es el Séga, una danza de esclavos que se representaba en encuentros secretos y hoy llena de color espectáculos multitudinarios.
La improvisación y los cantos que acompañan a esta danza libre hablan de la libertad ansiada por los esclavos africanos que fueron despojados de todo para trabajar en este rincón del mundo. Para muchos, esta danza con su genuino carácter, era la única vía de expresión y libertad del sistema esclavista, que se abolió en 1845.
Hoy en día, el Séga se ha fusionado con nuevos ritmos más actuales como el jazz o el reggae, lo que ha dado lugar a combinaciones aún más contagiosas cuyo ritmo lo escuchan jóvenes y mayores por todos los rincones de la isla.
Déjate llevar por su musicalidad y descubre una de las tradiciones más arraigadas de la isla. No te pierdas su animada puesta en escena y descubre esta muestra de la cultura de Mauricio.
Con el nombre de Séga se identifica tanto la música como la danza, un baile muy sensual en el que el contoneo y las ondulaciones de caderas se acompaña con los vuelos de vistosos y coloridos trajes. Los instrumentos que se utilizan en el sega son el ravane, un tipo de tampor, el triángulo, la serpe y el bobre.