El volcán Arenal emerge a más de 1.700 metros sobre el nivel del mar y ha tenido varios nombres a lo largo de la historia.
Algunas de las leyendas de los indígenas maleku, la tribu que habita en sus llanuras, cuentan que en su interior habitaba el dios del fuego. Su nombre más antiguo registrado es Los Ahogados (1852). Su nombre actual se debe a que sus lavas han formado, a lo largo del tiempo, arenas líticas y cristalinas depositadas en las faldas del volcán, dándole apariencia de un montículo de arena. Si tienes pensado viajar al país de la Pura Vida y hacer parada en el volcán debes tener en cuenta una serie de cosas. En primer lugar la forma de acceso. Pese a que en los mapas las distancias parecen cortas, es complicada transitarlas. Por ello recomendamos alquilar un 4x4 para poder recorrer este paraíso de la naturaleza. La entrada a muchos espacios naturales cuesta dinero. Se debe a que, en su mayoría, son reservas naturales que necesitan ser mantenidas. El parque nacional Volcán Arenal ofrece a los visitantes la oportunidad de admirarlo de cerca. Aunque no es posible llegar hasta la cima, puedes caminar por uno de los senderos sobre las rocas de lava hasta un mirador. El sendero circular es una agradable caminata de 3-4 km que transcurre a través de una selva tropical donde podrás observar su amplia vida silvestre. Uno de los aspectos más destacados del sendero es un árbol Ceibo de 200 años que saluda a los visitantes a la mitad del camino. Otras recomendaciones para disfrutar de una vista fantástica del volcán son: la Iglesia de San Juan, en el centro de La Fortuna; el Arenal Observatory Lodge, un albergue donde puedes alojarte y obtener la vista más cercana del volcán y los Puentes Colgantes. Estos son una auténtica maravilla. Un total de 14 puentes, ocho fijos y seis en suspensión, con una extensión de 3 kilómetros y alturas que alcanzan hasta los 60 metros de altura. Puede resultar demasiado potente para quienes tienen vértigo pero merece plenamente recorrerlos. A tu ritmo, sin prisa, disfruta de esta vista única del volcán y de la selva desde otra perspectiva.