Finlandia, 13 días
Siéntete un nórdico más y descubre las joyas que descansan en Finlandia, Noruega, Suecia y Dinamarca. Fusiónate con la naturaleza y deja que las sensaciones que transmiten las perlas del mar Báltico se apoderen de ti.
Disfruta de todas las ventajas y comodidades que te ofrecen estos viajes organizados que hemos pensado para ti. Los circuitos y viajes más completos a Finlandia. Descubre un país donde la alegría de su gente se superpone a las gélidas temperaturas, donde la naturaleza se desborda por los cuatro costados y donde la cultura se respira en cada rincón, vive una experiencia única en la vibrante Finlandia. Porque entre tú y Finlandia solo está Iberojet.
Siéntete un nórdico más y descubre las joyas que descansan en Finlandia, Noruega, Suecia y Dinamarca. Fusiónate con la naturaleza y deja que las sensaciones que transmiten las perlas del mar Báltico se apoderen de ti.
Aprovecha este viaje por Laponia para vivir un sueño de Navidad. Conoceremos a Papá Noel, veremos al espectacular Oso Polar y nos convertiremos en pilotos de Fórmula Uno en un karting sobre hielo, entre otras actividades. ¿Qué más se puede pedir?
Ríndete ante la belleza de la región de los fiordos en Noruega, descubre la modernidad en Helsinki y navega entre los canales de Estocolmo.
Enamórate de los países escandinavos en este completo recorrido de 15 días. Descubrirás la sirena en Copenhague, el Valle de Voss en Noruega y la calles de Helsinki.
Vive intensas emociones en Finlandia y conoce a Santa Claus. Durante este viaje podremos pescar en el hielo, recorreremos los bosques nevados con un trineo y visitaremos la casa secreta de Papá Noel. Un viaje inigualable por un paraíso blanco.
Enamórate de Laponia. Durante seis días viviremos en un paraíso blanco de bosques nevados y lagos helados. Recorreremos Iso-Syöte en moto de nieve, en un trineo tirado por huskies o renos y conoceremos el oso polar. ¿Preparados para esta aventura?
Conoce el extremo norte de Finlandia y enamórate de Ivalo. Pasear en trineo, descubrir la vida de los renos y practicar esquí de fondo son algunas de las actividades que haremos en este viaje.
Conviértete en un auténtico explorador. Ruka nos espera y durante seis días viviremos experiencias inolvidables. Iremos en moto de nieve, pescaremos en el hielo y conoceremos a los asombrosos osos polares. ¿Preparados?
Descubre el país de Santa Claus en Laponia. Nellim y alrededores, un paraje encantador de bosques cubiertos de nieve y ríos helados. El lugar ideal para practicar deportes de invierno.
Helsinki se integra con el entorno que le rodea. En un país como Finlandia, donde el mar es uno de los grandes protagonistas, la capital no podía hacer otra cosa que fusionarse de forma perfecta con el Báltico. El corazón de Helsinki late bien pegado al puerto, en la plaza del Mercado, donde los pescadores venden sus capturas recién traídas de las frías aguas que rodean el país. Desde allí, podemos iniciar un delicioso paseo por la capital del diseño. Y es que en Helsinki podremos encontrar una fabulosa colección de edificios de todo tipo, además de numerosas tiendas con las últimas tendencias en música, ropa, muebles o decoración. Dos catedrales frente a frente, una fortaleza Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, iglesias esculpidas en piedra, museos de todo tipo y unos cafés propios de otro siglo son sólo algunos de los atractivos que nos regalará Helsinki.
¿Preparados para llevarse una grata sorpresa? Finlandia nos aguarda con una capital a la última, con mucho diseño y una activa vida social; con pueblos llenos de encanto medieval, con lagos inmensos y bosques que nunca se acaban, con Papa Noel y la rica cultura sami, con las saunas y los cafés, con la aurora boreal y el sol de medianoche… ¡En marcha!
Viajar a Finlandia es una experiencia revitalizante. La pureza de su aire y del carácter de sus habitantes aporta un plus extra a un país de bellos paisajes, pueblos y ciudades llenos de encanto y unos contrastes muy especiales. Y es que, pese a estar entre las naciones más punteras del mundo, Finlandia permite pasar de una cosmopolita y activa Helsinki a una zona rural apartada del mundanal ruido en apenas unos minutos. Nieve en trineo, auroras boreales, mil planes bajo el sol de medianoche, arquitectura de vanguardia, cafés sacados de otra época, platos y bebidas sorprendentes, frondosos bosques llenos de vida… ¡Bienvenidos a Finlandia!
Bienvenidos donde todos, absolutamente todos, se sienten como niños. Da igual la edad que se tenga: en Rovaniemi todo está inundado de la ilusión porque allí se encuentra la residencia de Santa Claus. En esta curiosa localidad próxima al Círculo Polar Ártico todo el año es Navidad. Su principal atractivo es la posibilidad de darse un paseo por la vivienda oficial de Papá Noel, donde podremos observar sus aposentos, el lugar donde gestiona el envío de todos los regalos y saludarlo personalmente. Además, tendremos la opción de mandar una postal desde su estafeta de correos para que llegue, si queremos, en Navidad. Pero Rovaniemi es mucho más, porque desde allí podremos acceder a una gran cantidad de planes como paseos guiados, rutas en bicicleta, clases de esquí, visitas a granjas, recorridos en trineo, etc. Y una curiosidad más: las calles del centro de la ciudad forman una cabeza y las astas de un reno. Así se diseñaron después de la Segunda Guerra Mundial, cuando los nazis arrasaron la localidad.
Porvoo, es la segunda ciudad más antigua de Finlandia es, sin duda, una de las que más encanto ofrece al visitante. Sus deliciosas calles medievales permiten dar un paseo embriagador entre casas de madera caminando por suelos adoquinados que se alternan con las aguas del río. No hay que perderse la histórica catedral de madera y piedra que domina el casco antiguo desde lo alto de la colina. También hay varios coquetos museos que merecen una parada. Ahora bien, lo mejor que puede hacerse es dejarse llevar por sus calles e ir entrando en las muchas tiendas de artesanía típica que hay en el casco antiguo. Además, es un buen lugar para los amantes del dulce, porque hay varias pastelerías donde bordan el chocolate y el famoso pastel de Runeberg.