Viaje a Noruega: Circuito Capitales Escandinavas: Oslo, Estocolmo y Copenhague

Día 1: España - Oslo. Rumbo a una ciudad vibrante

Ha llegado la hora de ponernos en marcha hacia Escandinavia, una península que parece sacada de un cuento de hadas. Concretamente a Oslo, la capital de Noruega y la tercera ciudad más grande de la región. Situada en el sureste del país, Oslo se presenta ante nosotros como un escenario único, con grandes extensiones de zonas verdes.

Nos presentaremos en el aeropuerto con suficiente antelación como para llevar a cabo todos los trámites sin prisas ni agobios y, después de sobrevolar media Europa, aterrizaremos en la capital noruega. Allí nos estarán esperando para llevarnos al hotel y dejar nuestras cosas. A partir de ese momento, tendremos tiempo libre hasta el final del día para empezar a familiarizarnos con esta bella ciudad.

Hay que recordar que la moneda oficial del país es la corona noruega. Un buen consejo es tener cuidado a la hora de cambiar divisas. También echaremos un vistazo al termómetro: con un clima continental húmedo, Oslo goza de veranos cálidos y de inviernos por debajo de 0 grados. Y no nos olvidaremos de su gastronomía: múltiples y variadas son sus propuestas, desde las tradicionales albóndigas hasta el pescado más fresco, directo desde el mar a la mesa.

Al final del día, volveremos al hotel para disfrutar de una buena cena y de una apacible noche de descanso.

Día 2: Oslo. Estampas de contrastes

Dedicaremos la primera mitad de esta jornada a conocer los lugares más emblemáticos de Oslo a través de una interesantísima visita panorámica. En cuanto terminemos de desayunar, nos recogerán en el hotel y nos llevarán a recorrer lo mejor de la capital noruega.

El primer lugar que conoceremos en nuestro tour panorámico será el Parque Frogner, que alberga una colección de 212 estatuas de piedra, bronce y hierro fundido entre las que destacan el ‘Niño enfadado’ o el imponente ‘Manolito’. Todas ellas son obra del genial Gustav Vigeland. También tendremos la oportunidad de recorrer la animada calle Karl-Johäns, una de las arterias principales de la ciudad. Y, por supuesto, conoceremos los edificios más representativos de Oslo, como el Ayuntamiento, el Castillo de Akershus, el Palacio Real o el Parlamento, y subiremos a la colina del Holmekollen.

Para reponer fuerzas después de nuestra apasionante visita panorámica, disfrutaremos de un suculento almuerzo y, a continuación, dispondremos de tiempo libre hasta el final del día. No obstante, quien lo desee podrá contratar una actividad opcional que consiste en una excursión a la Península de Bygdoy. En este maravilloso lugar visitaremos el Museo Vikingo de Oslo, el Museo Nórdico de Arte Popular al Aire Libre y el Museo del Barco Polar Fram. En este navío fue, precisamente, en el que hicieron sus expediciones Admudsen, Nansen y Sverdrup.

Al final de esta intensa jornada llena de experiencias viajeras de primer nivel, regresaremos al hotel para disfrutar de una deliciosa cena y de una merecida noche de descanso.

Día 3: Oslo - Karlstad - Estolcomo. Rumbo a la bella capital sueca

Hoy diremos adiós a Oslo y a Noruega, ya que ha llegado el momento de entrar en territorio sueco. En cuanto terminemos de dar buena cuenta del desayuno en el hotel, nos vendrán a recoger para llevarnos, por carretera, hasta Estocolmo, pasando por Karlstad.

A poco más de 200 kilómetros de Oslo, y a orillas del Lago Vänern, se encuentra Karlstad, una ciudad de gran actividad industrial pero llena de puntos de interés histórico y cultural al mismo tiempo. Una vez allí, dispondremos de suficiente tiempo libre como para conocer sus enclaves más destacados, tales como la Catedral, la Plaza Stora Torget o el barrio histórico de Almen.

Después de nuestro paso por Karlstad, continuaremos el trayecto que nos separa de Estocolmo. Cuando, finalmente, lleguemos a la capital sueca, podremos dejar nuestras cosas en el nuevo hotel y disfrutar de unas horas de tiempo libre hasta que sea el momento de cenar y retirarnos a las habitaciones a descansar.

Día 4: Estocolmo. La capital donde tradición y vanguardia se dan la mano

Amanece sobre Estocolmo, y el tímido sol del norte de Europa parece invitarnos a salir a la calle para conocer la ciudad. Y eso es precisamente eso lo que haremos en cuanto terminemos de desayunar en el hotel. Dedicaremos la primera parte de la jornada a realizar una inolvidable visita panorámica que nos permitirá conocer los enclaves más destacados de la capital sueca.

Estocolmo es una de las urbes más elegantes y fascinantes del mundo, y un lugar perfecto para desconectar, relajarse y disfrutar de la ciudad. Por ello, nuestra visita estará dividida en dos partes: primero recorreremos en autobús sus puntos más importantes, y después pasearemos por la Ciudad Vieja de Estocolmo. Esta zona de la capital se llama en realidad ‘Gamla Stan’, y no es otra cosa que cuatro islas unidas entre sí por una serie de puentes y pasarelas, y sobre las que Birger Jarl fundó la ciudad hace más de 700 años. Este conjunto de calles del centro histórico de Estocolmo aglutina la mayor parte de los edificios emblemáticos y los lugares representativos de la ciudad, como la Catedral, el Palacio Real, la Gran Plaza o la Isla de los Nobles.

Una vez concluido nuestro tour panorámico por Estocolmo, disfrutaremos de un suculento almuerzo para reponer fuerzas, y a continuación tendremos el resto del día libre para hacer lo que más nos apetezca. Quien lo desee, tendrá a su disposición una actividad opcional a lo largo de la tarde que consiste en una doble visita: al Museo Vasa y al interior del Ayuntamiento.

El Museo Vasa es un galeón real hundido durante su botadura, recuperado 333 años después, y actualmente restaurado en todo su esplendor. El Vasa es el único barco del siglo XVII que ha sobrevivido hasta nuestros días. Con más del 98 por ciento de su estructura original y sus cientos de esculturas talladas, es un tesoro artístico y uno de los monumentos turísticos más visitados de Escandinavia. En lo que respecta al Ayuntamiento de Estocolmo, podemos decir que sus lujosos salones son el lugar donde, cada 10 de diciembre, se celebran el banquete y el baile de gala posteriores a la entrega de los Premios Nobel.

Tanto si decidimos aprovechar el tiempo libre recorriendo Estocolmo por nuestra cuenta como si elegimos apuntarnos a la visita opcional, al final de la jornada nos reuniremos en el hotel, donde nos estará esperando una confortable cama en la que pasar la noche.

Día 5: Estocolmo - Copenhague. Poniendo los pies por primera vez en Dinamarca

Hoy enfilaremos la recta final de nuestro gran viaje a las capitales escandinavas: en cuanto terminemos de desayunar en el hotel de Estocolmo, abandonaremos esta ciudad y pondremos rumbo al sur para dirigirnos a Copenhague, capital de Dinamarca y nuestro siguiente destino.

El trayecto que separa las dos capitales nórdicas constituye, sin duda, una parte esencial del viaje. La belleza de sus paisajes y el interés de algunos de sus puntos clave hacen que el camino sea, tal y como dicen, tan importante como el destino. Para llegar hasta Copenhague, recorreremos parte del interior de Suecia, dejando a nuestro paso la ciudad de Norrkoping. Esta urbe recibe el sobrenombre de ‘Manchester de Suecia’ debido a su importante industria, fundamentalmente textil y papelera.

También bordearemos el pintoresco Lago Vattern, añadiendo una nueva colección de imágenes de postal a nuestro álbum de fotos, y finalmente llegaremos a Malmö, bonita ciudad en la que destaca la plaza del Ayuntamiento, centro neurálgico de la Ciudad Vieja.

Para llegar desde Malmö a Copenhague, cruzaremos el Puente Oresund, considerado una de las mayores obras maestras de la ingeniería europea del siglo XX. Fue inaugurado el 1 de julio del año 2000, y cuenta con dos líneas de tren y seis pistas de carretera, que lo convierten en el puente combinado tren-carretera más largo de Europa. ¡Tiene una longitud de casi ocho kilómetros!

Cuando, por fin, lleguemos a Copenhague, podremos disfrutar de unas horas de tiempo libre para tomar un primer contacto con esta maravillosa ciudad, capital de Dinamarca y el lugar donde se funden a la perfección la historia del país y la modernidad de su pueblo. Al caer la noche, iremos al hotel para dormir plácidamente en la habitación de nuestro nuevo hotel.

Día 6: Copenhague. Modernidad y sostenibilidad

¡Por fin ha llegado el esperado momento de recorrer los lugares más emblemáticos de Copenhague! Una vez que hayamos terminado de dar buena cuenta del desayuno en el hotel, saldremos a la calle y emprenderemos una inolvidable visita panorámica por lo mejor de la capital danesa.

Nuestro tour por la ciudad comenzará por la Plaza del Ayuntamiento, una gran explanada que bulle de actividad social y comercial a todas horas, y en la que se encuentran algunos de los edificios más bonitos de Copenhague, como el Hotel Palace o el propio Ayuntamiento, que data de 1903 y luce en su fachada un gran número de esculturas de la mitología nórdica.

A continuación, nos acercaremos a conocer el exterior de dos palacios de gran belleza. Tanta, que están considerados dos de los más bonitos de Europa. Se trata del Palacio de Christianborg y del Palacio de Amalienborg. El primero es la sede del Parlamento danés, y en él predominan los rasgos del estilo neobarroco. Su elemento más característico es su gran torre, que, con 106 metros de altura, es la construcción más elevada de la capital. El segundo es la residencia oficial de la Reina Margarita, y está formado por cuatro palacios: el Palacio Brockdorff, el Palacio Moltke, el Palacio Levetzau y el Palacio Schack.

Como es lógico, no podíamos realizar un tour panorámico por Copenhague que no contemplara una visita a sus dos enclaves más populares y representativos: la Fuente de Gefion y la Sirenita. Se encuentran muy cerca la una de la otra, y son, seguramente, los dos símbolos más reconocibles de la capital. La primera está inspirada en una diosa de la mitología danesa, mientras que la segunda es una pequeña escultura de bronce que representa una sirena y que se halla en el parque Langelinie, junto al puerto de Copenhague. Mide apenas un metro y pesa solo 80 kilos, pero aún así es todo un emblema de la ciudad.

Una vez concluida nuestra visita panorámica, tendremos el resto del día libre para seguir conociendo lo mejor de Copenhague por nuestra cuenta. Aunque también tendremos la posibilidad de contratar una actividad opcional que consiste en una visita al Castillo de Frederiksborg. Esta imponente fortaleza renacentista fue mandada construir por el Rey Christian IV a principios del siglo XVII. Se encuentra en Hillerød, al norte de Sealandia, y se levanta sobre tres islotes del Slotssø, o ‘Lago del castillo’.

Al final de la jornada, tanto si hemos contratado la excursión opcional al Castillo de Frederiksborg como si hemos preferido quedarnos en Copenhague para pasear a nuestro aire, volveremos a nuestro hotel para pasar la noche.

Día 7: Copenhague - España. Volvemos a casa con un millón de recuerdos imborrables

Después de casi una semana recorriendo lo mejor de Oslo, Estocolmo y Copenhague, ha llegado el momento de volver a casa. Es una lástima, pero en nuestra maleta llevamos, además de la ropa y los enseres personales, un millón de recuerdos cosechados en las capitales escandinavas que nos acompañarán para siempre.

Cuando terminemos de desayunar, tendremos algo de tiempo libre hasta que vengan a recogernos al hotel para trasladarnos al aeropuerto. Allí tomaremos el vuelo que nos llevará de regreso a España. ¡Hasta la próxima!