Viaje a Francia: Circuito Estrasburgo, Alsacia y Selva Negra (Semana Santa desde León y Zaragoza)

Día 1: Zaragoza / León - Estrasburgo. El primer día del resto de nuestras vidas

La espera ha sido larga, los preparativos han sido emocionantes y la ilusión ha ido en aumento desde que supimos que íbamos a emprender este viaje. Pero por fin ha llegado el momento: ¡Nos vamos a Estrasburgo!

De cara a evitar largas colas y nervios de última hora, lo mejor será que nos presentemos en el aeropuerto con tiempo suficiente para facturar las maletas y llevar a cabo todos los trámites necesarios. Después, una vez hayamos embarcado, podremos ponernos cómodos y disfrutar del vuelo que nos llevará a Estrasburgo. Cuando aterricemos, nos estarán esperando para darnos la bienvenida y trasladarnos al hotel donde pasaremos las próximas cuatro noches.

Después de dejar nuestras cosas y ponernos cómodos, nos reuniremos con el guía que nos acompañará durante todo el viaje en la recepción del hotel. Y al final de la jornada podremos retirarnos a descansar y a soñar con todo lo que tenemos por delante…

Día 2: Estrasburgo - Colmar - Estrasburgo. Conociendo lo mejor de la capital alsaciana

Una de las mejores formas de conocer a fondo una ciudad es realizando una buena visita panorámica con un guía que nos vaya explicando todo lo que pasa a nuestro lado. Y eso es, precisamente, lo que haremos hoy en cuanto acabemos de desayunar en el hotel.

A lo largo de nuestro tour panorámico, podremos admirar el exterior de la Catedral de Estrasburgo. Este majestuoso templo católico de estilo gótico fue construido en el siglo XV utilizando la arenisca rosa como material principal. A causa de la elección de esta piedra, el color de la catedral parece variar a lo largo del día y dependiendo de la tonalidad del cielo. Merece la pena prestar atención a la fachada de la catedral: el gran número de esculturas que la adornan constituye no solo un conjunto monumental único, sino que además supone una colección de imágenes extraordinaria de la Edad Media.

Aunque la catedral de Estrasburgo es una verdadera obra maestra de la arquitectura gótica, no será el único enclave que conoceremos durante nuestra visita panorámica a la ciudad. También pasaremos por el Barrio Antiguo -‘La Grande Île’- y sus casas señoriales, entre las que destaca el Palacio de Rohan, así como por la zona conocida como “la Petite France”. Este barrio es uno de los más animados y vibrantes de Estrasburgo, y cuenta con una serie de calles adoquinadas, de canales y de casas con entramado de madera que lo convierten en un punto de visita obligado para cualquier viajero ávido de experiencias que elija esta ciudad como destino.

Cuando nuestra visita panorámica por Estrasburgo haya concluido, abandonaremos la ciudad por unas horas y nos dirigiremos a Colmar, con el objetivo de conocer otro de los puntos clave de Alsacia. Una vez allí, realizaremos otra inolvidable visita panorámica, que no hará sino añadir más imágenes y recuerdos imborrables a la agenda de este fabuloso viaje.

A lo largo de nuestro tour, pasaremos por un barrio de casitas tradicionales alsacianas que se ubican a lo largo de la orilla del rio Launch y que recibe el nombre de ‘Petite Venise’. También tendremos la oportunidad de ver y fotografiar los canales y los muelles de la ciudad, así como el patio de la casa-museo de Auguste Bartholdi, la “Casa de las Cabezas”, la Colegiata de San Martin o la fachada de la casa Pfister.

Tras todas las intensas y memorables actividades de la jornada, volveremos a Estrasburgo y nos prepararemos para pasar una merecida noche de descanso. ¡Hasta mañana!

Día 3: Estrasburgo - Castillo de Haut Koenigsbourg - Ruta de los Vinos de Alsacia - Estrasburgo. Jornada de fortalezas medievales y deliciosos vinos

Hoy visitaremos un lugar que, sin ninguna duda, hará volar nuestra imaginación y nos hará sentir que formamos parte de un cuento de hadas. Se trata del Castillo de Haut Koenigsbourg, una imponente construcción que se encuentra al suroeste de Estrasburgo, en las estribaciones del Parque Natural Regional Ballons des Vosges.

Antes de empezar nuestra excursión, disfrutaremos de un buen desayuno en el hotel y, a continuación, nos dirigiremos al Castillo de Haut Koenisbourg. Fue construido en el siglo XII con el objetivo de mantener vigiladas las rutas comerciales que pasaban por la zona. Al norte circulaban caravanas con trigo y vino, y de oeste a este pasaban las de sal y plata. No solo admiraremos la belleza del castillo por fuera, sino que visitaremos su interior, en el que reina la elegancia y el refinamiento.

Tras nuestro paso por el Castillo de Haut Koenisbourg, realizaremos un inolvidable recorrido por la Ruta de los Vinos de Alsacia. Disfrutaremos contemplando el paisaje, visitaremos una bodega para hacer una degustación de los mundialmente famosos vinos de la región, y nos acercaremos a conocer las dos poblaciones más bonitas y representativas de la zona. Primero visitaremos Ribeauville, donde tendremos tiempo libre para pasear por sus agradables calles y plazas, y después iremos a Riquewihr, la villa que inspiró a los dibujantes de la factoría Disney para crear el pueblo de la ‘Bella y la Bestia’.

Después de todas las apasionantes actividades de la jornada, regresaremos a Estrasburgo e iremos directamente al hotel para pasar la noche.

Día 4: Estrasburgo - Selva Negra - Estrasburgo. Una incursión en territorio alemán

A lo largo de esta cuarta jornada de viaje, tendremos la oportunidad de conocer más y mejor la región conocida como Selva Negra. En cuanto terminemos de desayunar, dejaremos Estrasburgo por unas horas y nos dirigiremos a la frontera alemana.

Nuestro primer destino será Triberg, donde tendremos tiempo libre para conocer por nuestra cuenta el principal reclamo de la ciudad: las Cascadas de Triberg. La entrada está incluida en la actividad. Estos saltos de agua, en mitad del curso del río Gutach, están repartidos en siete niveles diferentes, y llegan a alcanzar una altura de 163 metros. Estas cascadas son todo un espectáculo de la naturaleza, y están consideradas las más populares de toda Alemania.

La siguiente parada tendrá lugar en Titisee, una pintoresca población situada a poco más de 40 kilómetros al sur de las Cascadas de Triberg. Esta localidad, una de las más populares y visitadas de la Selva Negra, se encuentra a orillas del Lago Titisee, una masa de agua dulce de 1,3 kilómetros cuadrados de superficie y 20 metros de profundidad que se halla a 850 metros sobre el nivel del mar. Aquí también dispondremos de tiempo libre, que podremos emplear paseando por las orillas del lago o comprando algún recuerdo de nuestro paso por la zona en las tiendas del núcleo urbano. Si queremos adquirir algún producto gastronómico, los más recomendables son las frutas del bosque que se producen en los alrededores de Titisee y la tarta más famosa de Alemania: la Selva Negra.

Tras nuestro paso por las Cascadas de Triberg y por el Lago Titisee, realizaremos una última y fascinante parada en Friburgo, una bonita ciudad muy cerca de la frontera francesa y a 35 kilómetros de Titisee. Una vez allí, tendremos tiempo libre para pasear por su animado y pintoresco centro histórico y para visitar alguno de sus puntos clave, como el Nuevo Ayuntamiento, la Plaza de los Agustinos y, sobre todo, la catedral. Este magnífico templo de estilo gótico se empezó a construir en el siglo XII, y cuenta con una fachada preciosa que está considerada una obra maestra de la arquitectura medieval.

Después de un día apasionante pero agotador, emprenderemos el viaje de vuelta a Estrasburgo, donde nos estará esperando la cama de nuestra confortable habitación del hotel para dormir plácidamente.

Día 5: Estrasburgo - Zaragoza / León. Con los pies en casa pero el corazón todavía en Alsacia

Lo hemos pasado en grande a lo largo de estos días, ¿verdad? Hemos tenido la oportunidad de conocer Estrasburgo, Alsacia y la Selva Negra, y hemos disfrutado de sus paisajes, de sus bonitas ciudades y de su rica gastronomía. Pero ahora, lamentablemente, ha llegado el momento de decir adiós a estos maravillosos lugares y de emprender el viaje de vuelta a España.

Después de desayunar, dispondremos de algo de tiempo libre hasta que llegue la hora de ser trasladados al aeropuerto. Allí subiremos al avión que nos llevará, sobrevolando parte del Viejo Continente, hasta casa.