Viaje a los fiordos noruegos

Los fiordos tienen la apariencia de un lago; aguas tranquilas rodeadas de montañas. Sin embargo, tienen una peculiaridad que es lo que los distingue de aquellos, y es su agua salada. Aunque cuenta con más de mil, son ocho los principales que podemos visitar en Noruega. Si quieres navegar por ellos y contemplar los impresionantes acantilados que se alzan a ambos lados, es hora de hacer un viaje a los fiordos noruegos.

Tanto si te apasionan las curiosas formaciones que podemos encontrar en la naturaleza como si solo quieres descubrir un paraje sin igual, desde Iberojet te invitamos a disfrutar de esta inolvidable experiencia. ¡Conviértete por unos días en un auténtico vikingo surcando estas aguas!

Cuándo hacer un viaje a los fiordos noruegos

Puesto que los países nórdicos se caracterizan por alcanzar temperaturas bastante frías durante los meses de invierno, es común preguntarse qué tal es el tiempo en los fiordos noruegos a lo largo de todo el año. La respuesta es bastante sencilla, ya que todo depende de lo acostumbrados que podamos estar al frío.

Los fiordos noruegos en verano disfrutan de una temperatura agradable, ya que el clima es cálido. Concretamente, entre abril y mayo la temperatura se encuentra entre los 0º y los 9º, y entre junio y septiembre va desde los 10º hasta los 20º. Por lo tanto, si no queremos preocuparnos en exceso por la climatología, lo ideal es viajar entre los meses de mayo y septiembre, siendo mayo y junio los de menor cantidad de visitantes. Durante los demás meses del año, puede resultar algo incómodo salvo que estemos familiarizados con este tipo de climas.

Además, durante el verano, tiene lugar lo que se conoce como “sol de medianoche”, y es que el sol nunca termina de descender y es de día prácticamente siempre. El único detalle que debemos tener en cuenta es que si también queremos disfrutar de las auroras boreales las fechas son incompatibles.

Aunque sigue siendo posible contemplarlas, es a partir de septiembre y hasta marzo cuando comienza a oscurecer y se facilita su visibilidad. No obstante, también influye la contaminación lumínica, la actividad solar y lo despejados que estén los cielos. La hora ideal es entre las 23h y las 2am.

Qué circuito de fiordos noruegos podemos realizar

Tal y como hemos dicho, los fiordos noruegos suman más de mil en total, pero los principales son una cifra bastante inferior. A continuación te mencionamos algunos de los más destacados para que no te falte ninguno en tu circuito por los fiordos.

Sognefjord

Se trata indiscutiblemente del principal fiordo. Su longitud es la mayor, alcanzando los 200 kilómetros, su profundidad supera los 1.300m en la zona más honda y las montañas que se alzan a sus laterales superan los 1.700m de altitud. ¡Simplemente impresionante! Cuenta, además, con múltiples brazos.

Nærøyfjord

Uno de dichos brazos es precisamente es fiordo, el Nærøyfjord, que ha sido declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, así como patrimonio natural de primer orden por la Sociedad National Geographic.

Hardangerfjord

Posicionado como el tercer fiordo más grande en todo el mundo y el segundo en Noruega, sus 179 kilómetros de longitud también merecen una visita. Se trata además de todo un icono nacional, que muestra su belleza en todo su esplendor durante la primavera, ya que florecen los manzanos de sus colinas. Sus dos brazos también disfrutan de una popularidad similar; el Sorfjord y el Eidfjord.

Geirangerfjord

También considerado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, su tamaño dista ya mucho de los anteriores; tan solo 15 kilómetros de longitud. Pero, ¿y qué le hace entonces tan especial? Pues la diversidad de cascadas que te encontrarás mientras lo recorres. Algunas de las más conocidas son la de Friaren, Syv Søstrene o Brudesløret.

Lysefjord

Se trata del fiordo con una ubicación más sureña, dentro de la parte occidental de Noruega. Con 42 kilómetros de longitud y algo más de 400 metros de profundidad. Sin embargo, a lo largo de su recorrido se encuentra uno de los puntos de mayor expectación turística; el Pulpito. Un altiplano rocoso de 604 metros de altura que se asoma sobre el fiordo.

En su zona sur, se contempla también la meseta Kjerang, de 1.100m de altura. Desde allí puede escucharse el sonido de las rocas, que se asemeja al de un disparo, y la roca Kjerag, donde una roca de pequeño tamaño se mantiene en equilibrio entre dos montañas.

Sin duda, el viaje a los fiordos noruegos es una oportunidad para dejarse sorprender por los caprichos de la naturaleza. Si quieres disfrutar de los mejores circuitos y viajar sin preocupaciones, ¡Iberojet te lleva hasta allí!