
México: Caminos de México
- Duración
- 18 días
- Tipo de circuito
- Gran Viaje


México se ubica al sur de Norteamérica. Es un país extenso y de geografía muy variada, lo que le confiere climas y vegetaciones diversos. Recorrerlo es un lujo para los sentidos y para el conocimiento. Tal vez la palabra apropiada para definirlo sea "mestizaje". Aquí conviven gentes de pueblos muy dispares. Como distintos son los idiomas que oímos en sus mercados, repletos de bella y colorida artesanía. El pasado y la arqueología son sencillamente apabullantes. El entorno natural, precioso. Y nunca deja de sorprendernos su deliciosa gastronomía. Nos impacta también el calor de su gente. Acogedora y tierna. Siempre con una sonrisa en los labios.
La Riviera Maya cuenta con el segundo arrecife de coral más largo del mundo y es un lugar ideal para el relax y el buceo.
México ofrece un sinfín de posibilidades para el viajero. La cultura y el patrimonio se combinan a la perfección con un entorno natural de gran belleza y espectacularidad. La Riviera Maya es, en este sentido, uno de los grandes atractivos del país. Las ruinas prehispánicas de Tulum se exhiben, misteriosas, frente a un mar azul turquesa. Los cenotes nos ofrecen un baño entre estalactitas. Y el arrecife de coral, el segundo más largo del mundo, nos permite bucear entre la fauna marina más colorida y diversa. En este viaje pasamos dos días en la Riviera Maya, después de casi dos semanas descubriendo ciudades, pueblos y yacimientos. Las arenas blancas invitan al descanso y al relax. Todo ello en un marco de playa, tiendecitas y cafés. La guinda perfecta para el pastel.
Emociones nuevas en tu viaje
La observación de animales marinos en la Riviera Maya es un espectáculo apto para todos los gustos y todos los niveles. No hace falta ser un gran deportista para disfrutar de una de las aguas más transparentes del planeta. Y si eres un experto del buceo, este es sin duda el lugar para una inmersión inolvidable. Practicar el snorkel en el arrecife coralino probablemente sea la actividad más popular. Con una careta, un tubo y unas aletas será suficiente para observar peces, invertebrados y algas de múltiples colores. Playa del Carmen, Puerto Morelos y la Isla de Cozumel son buenos lugares para practicarlo.
Pero hay mucho más. La Riviera Maya nos ofrece también excursiones de submarinismo en cenotes, unas espectaculares cuevas de agua dulce con una abertura en su parte superior. También podemos nadar entre tortugas en la zona de Akumal. E incluso practicar el snorkel rodeados de tiburones ballena, que pueden alcanzar los 12 metros de longitud.

El arrecife coralino mesoamericano es el segundo más largo del mundo, después del de Australia. Se extiende a lo largo de 1.000 kilómetros, frente a las costas caribeñas de México, Belice, Guatemala y Honduras. Aquí viven numerosas especies de peces, tortugas y manatíes, algunas de ellas en peligro de extinción, conformando un ecosistema único y excepcional.
Los tacos, las fajitas y el tequila son elementos internacionales de la gastronomía mexicana. Pero durante el viaje descubrimos que la cocina del país va mucho más allá de los tópicos. Ni todo es picante ni el guacamole es el único rey.
Uno de los platos más sabrosos es, sin duda, los chiles en nogada. Son típicos de Puebla, ciudad que visitamos. La base es el chile poblano, de inconfundible color verde y no demasiado picante. Está relleno de un guisado de carne picada y frutas. Todo ello se adereza con una salsa blanca, elaborada con nuez, perejil y granada. Advertimos en el plato los colores de la bandera de México: verde, rojo y blanco. Este hecho lo ensalza, aún más, como plato muy representativo de la cocina nacional.

El nombre "chile" proviene del náhuatl, uno de los idiomas indígenas de México. Forma parte de la dieta americana desde hace, al menos, 9.500 años. En España se lo conoce como pimiento. Esta denominación se atribuye a Cristóbal Colón, que relacionó su sabor con el de la pimienta. La llegada del "chile" a Europa en el siglo XV revolucionó la gastronomía del viejo continente. Fue fundamental su uso en la preparación de embutidos, entre otros muchos platos.
Imposible resistirse a su encanto. Los alebrijes están elaborados con madera o cartón. Representan seres imaginarios y se pintan con llamativos colores. Visitamos un taller de alebrijes cerca del yacimiento de Monte Albán, en Oaxaca. Allí vemos cómo los artesanos trabajan. Y si queremos podemos elaborar nuestro propio alebrije para llevárnoslo de recuerdo.
En la región de Oaxaca los alebrijes se elaboran con madera de copal, aromática y moldeable. Los artesanos de la región deciden qué figura van a crear en función de la forma del tronco. La imaginación echa a volar, ¿Una serpiente alada? ¿Un jaguar verde? ¿O tal vez un unicornio?. Participar en la elaboración de un alebrije es también una manera de entrar en contacto con las familias que viven de esta artesanía. El trato con los mexicanos, amables y muy respetuosos, siempre es un placer.

La elaboración de figuritas en madera de copal es muy antigua en la región de Oaxaca. Su historia se remonta a la época prehispánica, cuando los zapotecas fabricaban amuletos con finalidades rituales. Sin embargo, los alebrijes son de creación moderna y se introdujeron en la región se produjo en los años 80. La fusión de ambas técnicas ha dado un gran impulso a la artesanía de la zona en las últimas décadas.
Uno de los grandes atractivos de viajar a México es sin duda su gastronomía. Durante la visita a San Cristóbal de las Casas aprendemos cómo se elabora una auténtica tortilla mexicana. Y así sabremos cómo prepararlas a nuestro regreso a casa. La tortilla mexicana puede ser de trigo pero lo más corriente es que sea de maíz. Es la base de numerosas y riquísimas recetas, como por ejemplo los tacos, las enchiladas o las quesadillas. Las hay blancas, azules y amarillas, siendo estas últimas las más habituales. Parar a comer tacos es sin duda una de las experiencias más pintorescas del viaje a México. Al pastor, de carnitas, al carbón... Los hay de muchos tipos. Conviene añadirles cebolla, cilantro y salsa picante si queremos obtener un sabor genuino.

El origen de las tortillas de maíz se remonta a la época prehispánica. Los historiadores han determinado que ya se consumían, por lo menos, en el año 1.500 antes de Cristo. Y lo han podido afirmar gracias al hallazgo de planchas de arcilla de la época, utilizadas para cocer las tortillas.
Allí donde hay población indígena hay buena artesanía. Esta máxima nos servirá para identificar rápidamente los lugares donde comprar artículos hechos a mano. Oaxaca es uno de los mejores lugares para hacerlo. Los indígenas de los pueblos cercanos se acercan hasta aquí cada día para exponer piezas de madera, cerámica y tela. Elaboradas con técnicas ancestrales, aprendidas de generación en generación. El mercado de abastos de Oaxaca es un hervidero. Entrar en él supone toda una experiencia. El México más auténtico se nos ofrece en un festival de aromas, colores y texturas. Aquí se vende artesanía, comida y artículos cotidianos de toda clase. En medio de la multitud conviene ser cautos y tener nuestras pertenencias bien controladas.
Muy cerca encontramos el Mercado Juárez, también abierto todos los días y muy céntrico. Este es el mejor lugar para comprar artesanía. Vestidos regionales, piezas en cuero y madera... Una experiencia inolvidable.

La cerámica elaborada con barro negro es típica de Oaxaca y su existencia se remonta a los tiempos de la ciudad prehispánica de Monte Albán. Los indígenas la siguen elaborando a día de hoy. La cerámica negra mate es la más ancestral, mientras que la brillante es fruto de técnicas modernas. En cualquiera de sus variantes, es una artesanía de gran belleza y muy valorada en todo el país.
Si te gustan los animales, la Riviera Maya te ofrece una experiencia sin igual: nadar con delfines. Puede ser que los hayas visto en exhibiciones de parques acuáticos. O mientras navegabas en el mar. Pero nada es comparable a la posibilidad de estar junto a ellos. Sentir su tacto suave. Conectar con uno de los animales más inteligentes, cariñosos y veloces. En el Caribe Mexicano hay diversas opciones si te apetece probarlo. Desde una pequeña inmersión hasta varias horas en compañía de estos mamíferos excepcionales. La experiencia supera cualquier expectativa: los delfines te besan, bailan contigo y te catapultan como si fueras un auténtico acróbata. Los grupos suelen ser reducidos, con lo cual la posibilidad de tocarlos e interactuar con ellos es segura. El nado puede ser en piscinas o en zonas delimitadas en el mar, dependiendo de la excursión que hayamos elegido.

El delfín es un mamífero acuático. Vive en manadas que pueden alcanzar los 1.000 ejemplares. Y se alimenta de calamares, sardinas, arenques y bacalaos. Tal vez lo más llamativo sea su prodigiosa inteligencia. El delfín es capaz de localizar objetos emitiendo sonidos. Si un compañero está herido, le socorre. Y, al menos algunas subespecies, cada individuo tiene un silbido que le identifica.
Una de las experiencias más fascinantes de este viaje es la visita a San Juan Chamula, un pueblo indígena situado a tan solo 10 kilómetros de San Cristóbal de las Casas (Chiapas). Aquí, los ritos y las costumbres mayas no desaparecieron sino que se fusionaron con el Cristianismo. Dando como resultado rituales muy curiosos, donde percibimos el misterio de las religiones más antiguas. San Juan Chamula está habitado por diversas comunidades mayas, siendo la tzotzil la más numerosa. Ha conservado cierta autonomía política y cuenta con una policía propia. Sus ciudadanos son muy severos y no permiten a los turistas fotografiar los ritos religiosos. El que incumpla esta norma se arriesga a perder la cámara fotográfica. Tal vez el lugar más llamativo de San Juan Chamula sea la iglesia de San Juan Bautista. Al entrar percibimos una atmósfera oscura y misteriosa. Aquí no hay bancos. Los fieles se arrodillan en el suelo, entre ramas de pino. En ocasiones, las velas se adhieren al pavimento con su propia cera. Y los santos llevan un espejo que repele el mal. Es difícil quedar indiferente ante una expresión tan auténtica del sincretismo religioso. Los ritos más telúricos perviven entre las figuras de los santos. Agudizamos los sentidos y entramos en un mundo remoto y enigmático.

En San Juan Chamula la celebración del carnaval coincide exactamente con los cinco días perdidos del calendario maya. Mediante una hábil operación de camuflaje, los indígenas tzotziles consiguieron mantener una de sus tradiciones más auténticas. Y así sigue siendo en el día de hoy. El calendario maya tenía dieciocho meses de 20 días, lo que daba como resultado un año de 360 días. Puesto que les sobraban cinco días, los pasaban de celebración: danzando, jugando y rezando. El carnaval de San Juan Chamula, denominado K'in Tajimoltic (fiesta del fuego) se celebra durante los cinco días previos al miércoles de ceniza. Si estás en México durante esta época no te lo pierdas.
Los mayas alcanzaron un nivel de desarrollo sociocultural que sigue despertando admiración hoy en día. Así, por ejemplo, fueron los primeros en utilizar un sistema numérico vigesimal, es decir, basado en el número 20, así como en utilizar el número 0. Se piensa también que pudieron ser los primeros en utilizar la escritura en la llamada Mesoamérica, así como los primeros en utilizar un producto tan habitual como el cacao como alimento, además de como moneda. Sus técnicas arquitectónicas siguen sorprendiendo actualmente, debido a su complejidad y a su manejo de conceptos como la fatiga de los materiales. Y también son muy conocidos por sus observaciones astronómicas, que les permitieron crear un calendario de 365 días e incluso predecir eclipses.

Un malentendido sobre el calendario maya generó cierta alarma en 2012 ya que muchos decían que los mayas predecían el fin del mundo para el 21 de diciembre de ese año. Lo cierto es que los mayas basaban su calendario en ciclos y, según indicaron varios científicos, por ejemplo los de la NASA, así como los representantes actuales de los descendientes de los mayas, para el 21 de diciembre de 2012 lo que indicaban es que se produciría el comienzo de una nueva era o, dicho de otra manera, se pasaría del 31 de diciembre al 1 de enero según nuestro calendario actual. Es más, negaron incluso que los mayas tuvieran intención de hacer profecías.
El plan de viaje a tu alcance
- Sin comidas.
- México City
- Desayuno.
- México City
- Panorámica de México
- Desayuno.
- México City
- Desayuno.
- Veracruz
- Zona arqueológica de Tajín
- Desayuno.
- Xalapa Enríquez
- Puebla
- Pueblo mágico de Coatepec
- Museo de Antropología de Xalapa
- Desayuno.
- Oaxaca De Juárez
- Panorámica de Puebla
- Desayuno.
- Oaxaca De Juárez
- Panorámica de Oaxaca
- Zona arqueológica de Monte Alban
- Desayuno. Comida.
- Tuxtla Gutiérrez
- Zona arqueológica de Mitla
- Desayuno. Comida.
- San Cristóbal De Las Casas
- Paseo en barca
- Desayuno.
- San Cristóbal De Las Casas
- Comunidades indígenas
- Mercado Local
- Desayuno.
- Palenque
- Desayuno. Comida.
- Campeche
- Zona arqueológica de Palenque
- Desayuno. Comida.
- Uxmal
- Mérida
- Zona arqueológica de Uxmal
- Panorámica de Mérida
- Desayuno. Comida.
- Playa Del Carmen
- Cenote Saamal
- Zona arqueológica de Chichén Itzá
- Todo incluido.
- Playa Del Carmen
- Todo incluido.
- Playa Del Carmen
- Desayuno.
- Cancún
- Cancún
- Según itinerario
- España
¿Quieres saber más de México?
La gastronomía de México fue declarada por la Unesco Patrimonio de la Humanidad. Y de hecho, constituye por sí misma una razón para viajar a este país, rico en legado histórico, algo que también se deja sentir fuertemente en su cocina, sabrosa y llena de matices. Por cierto, que este país tiene reconocidos más de 1.500 platos de comida y bebida típicas. La tortilla de maíz es la base de alimentación en este país, ya que puede ir rellena de ingredientes o solo acompañar las comidas. Uno de los rellenos habituales es la carne, sobre todo el pollo y cerdo cocinados con salsas especiadas que le aportan ese toque picante tan particular de la comida mexicana gracias, fundamentalmente, al chile. Y también se acompañan con numerosas verduras, así como con aguacate, con el que se elabora el famoso guacamole que acompaña a fajitas y quesadillas, o sirve para tomar con nachos.
La fruta merece un capítulo aparte ya que el clima de este país hace que crezcan en él frutas tropicales del estilo de la papaya, la chirimoya, el mango, los melocotones (llamados allí duraznos) y los higos chumbos (a los que llaman tunas). Con ellas se elaboran también unos deliciosos zumos de mil sabores. Son un postre ideal, pero también conviven con un gran número de platos dulces, algunos de los cuales están vinculados a fiestas religiosas, como el Pan de Muerto que se toma el 1 de noviembre con motivo del Día de Todos los Santos.
Y por supuesto, las bebidas mexicanas, algunas conocidas en el mundo entero. Desde las cervezas artesanales hasta el mezcal, el pulque o el tequila, todos ellos de alta graduación alcohólica. Este último, el más conocido internacionalmente, suele tomarse con sal y limón debido a que hace mucho tiempo en el norte del país hubo una fuerte epidemia de las vías respiratorias y, dada la falta de medicamentos para curar o aliviar los síntomas, los médicos recomendaban tomar el tequila con sal y limón para, por ejemplo, quitar la afonía. Y desde entonces hasta hoy. Fuera ya de la gastronomía más ortodoxa, los mexicanos también utilizan algunos ingredientes que pueden resultar inverosímiles para muchos de sus visitantes. Así, los viajeros más atrevidos pueden probar los chapulines asados (grillos en España), ricos en proteínas y calcio, y que se pueden tomar dentro de fajitas y quesadillas. También pueden verse platos tradicionales elaborados con carne de iguana o de serpiente de cascabel, así como con el llamado gusano de maguey, que es más bien una larva, precisamente la que se echa también en el las botellas de mezcal
México es un país de oportunidades para los amantes del shopping. Desde las artesanías más cuidadas hasta las marcas más lujosas, todo es posible en un país en el que los mercadillos conviven con grandes centros comerciales en una oferta más que completa. En las ciudades grandes hay numerosos centros comerciales plagados de tiendas, desde las más exclusivas a las más comerciales. Este tipo de establecimientos proliferan también en lugares de gran afluencia de viajeros, como Cancún o Riviera Maya.
Este país cuenta también con un gran número de diseñadores de moda que harán las delicias de todos los gustos en sus propias tiendas. Pero para los que prefieran hacer sus compras en mercadillos, México cuenta con todo tipo de ‘tianguis’. Este término procede de la palabra ‘tianquiz’ en lengua náhuatl, cuyo origen no es otro que México. En estos coloridos lugares, que se instalan periódicamente en el mismo lugar, puede comprarse prácticamente de todo, desde alimentos hasta artesanías o aparatos electrónicos. Son también el lugar ideal para sumergirse en algunas de las costumbres del país, incluyendo las gastronómicas, pudiendo en estos lugares probar los famosos chapulines asados mexicanos.
•Septiembre: día 15 y 16 de septiembre México se viste de gala para celebrar el Día de la Independencia, en la que se conmemora la llamada del Padre Hidalgo a los mexicanos para que se liberaran de los españoles en el año 1810. Todas las plazas están abarrotadas de lugareños que se reúnen en este enclave para divertirse ya que el ambiente que se respira es muy festivo, con música y fuegos artificiales.
•Noviembre: día 1 y 2 de este més es el día en el que se celebra el Dia de los Muertos. Se trata de la celebración más popular y pintoresca del país. Está llena de colores, comida y los lugareños se disfrazan.
•Diciembre: día 12 de diciembre el país rinde homenaje a su patrona con el Día de la Virgen de Guadalupe. Según la leyenda, la Virgen apareció en el cerro de Tepeyac.
•Marzo/abril: la semana santa se celebra, como en España, en marzo o abril y es una de las fiestas más singulares del país. Durante este festejo México se llena de procesiones, escenificaciones y rituales. En localidades como Oaxaca, San Cristóbal de las Casas o Taxco esta celebración es especialmente apasionado. Además, los indios tarahumaras construyen figuras de cartón con la imagen de Judas y las quemas. El Sábado Santo se tira agua paseantes.