Escocia: Todo Escocia e Islas Orcadas
- Duración
- 8 días
- Tipo de circuito
- Circuito
El vuelo te llevará a la amable capital de Escocia, Edimburgo, cuyo corazón está plagado de tesoros que han sido catalogados como Patrimonio Histórico de la Humanidad. Desde allí partirá tu itinerario rumbo al norte, hacia las Highlands, con parada en la estilosa ciudad de Glasgow. ¿Te apetece conocer el mítico lago donde cuenta la leyenda que en él habita el famoso monstro marino Nessi? ¡Hecho! Tendrás la opción de dar un paseo en barco por el lago Ness y visitar el castillo de Urquhart. Recorrerás el puente de Stirling, testigo de grandes batallas, como la protagonizada por el valiente William Wallace, escena que reconocerán los más cinéfilos por aparecer en la película Braveheart.
Las principales ciudades de Escocia te enamorarán. Edimburgo, con su Ciudad Nueva (New Town) y por la Ciudad Vieja (Old Town) y Glasgow, uno de los mejores ejemplos de ciudad victoriana.
La siguiente etapa del viaje será Shetland, un archipiélago del mar del Norte. En concreto, descubrirás Mainland, la isla principal del archipiélago donde abundan los pueblos marineros. Descubrirás el Glasgow más arty, donde se crean las nuevas tendencias que después se exportan al resto del mundo, y la pintoresca ciudad de Stirling, la antigua capital del país. ¿A qué esperas?
Emociones nuevas en tu viaje
El origen de la capital escocesa estuvo ligado a capítulos violentos. En este caso, la erupción de un volcán cercano, que ahora está extinto, dio origen a una formación rocosa imponente.
Desde comienzos de la Historia, siempre existió sobre esta roca algún tipo de estructura con fines militares. Sin embargo, en el siglo XII se construyó el majestuoso castillo de Edimburgo. Su construcción se desarrolló al filo de unos vertiginosos acantilados, por lo que solo se puede acceder por una de sus fachadas, a través de la Royal Mile o milla real. Hasta épocas georgianas, la parte norte del castillo estaba bañada por un lago, Nor´Loch, donde actualmente están los preciosos y cuidados jardines de la princesa, Princess Gardens. Lo mejor para descubrir y profundizar en la importancia de este castillo es unirse a una visita guiada. Sus cuartos, estructuras, prisiones, iglesias y cámaras dibujan una Historia convulsa, agitada, violenta y única. Incluso los más reacios a unirse a circuitos turísticos encuentran en el castillo un gancho perfecto para querer saber más. El Castillo de Edimburgo está gestionado por un organismo especializado: Historic Scotland, que gestiona gran parte de sus elementos de patrimonio nacional. En el interior del Castillo, encontraras Los Honores de Escocia, donde encontrarás las joyas de la Corona escocesa y los objetos del tesoro real escocés. La Piedra de Scone o "Piedra del Destino” era el lugar donde se coronaban a los reyes escoceses.
En 1.840 se creó el cementerio de mascotas para los animales de compañía de los soldados. Es una de las vistas más populares del Castillo.
El Military Tattoo es un festival anual, donde se puede disfrutar de desfiles militares con trajes tradicionales y exhibiciones musicales a ritmo de gaita. Dichos desfiles tienen lugar en la diáfana explanada frente a la entrada del Castillo de Edimburgo. La entrada al castillo está flanqueada por dos estatuas de personajes legendarios: el guerrero William Wallace y del rey Robert I Bruce.
La parte antigua de Edimburgo es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1.995. A pesar de sus vaivenes históricos, ha conservado su planta medieval y muchos de sus edificios clásicos han podido ser reformados. La ciudad creció a los pies de su colosal Castillo, motivo de orgullo y respeto por locales y visitantes.
La arteria principal de esta sección de la ciudad es la Royal Mile, con multitud de tiendecitas y pubs tradicionales, donde degustar sus whiskys, cervezas, haggies (plato típico no apto para vegetarianos) y excelentes shows de música de violines y gaitas. En los laterales de la Royal Mile encontraremos los misteriosos y angostos closes o callejones, donde a menudo se han escrito los capítulos menos transparentes de la Historia. Los principales edificios de la parte antigua son, entre otros, la Catedral de San Giles y los Tribunales Supremos, el Parlamento, el Palacio de Holyrood, la Asamblea de la Iglesia de Escocia, el Museo Nacional y la Universidad. Caminar por el casco antiguo sin mapa es garantía de perderse, al mismo tiempo que descubriremos rincones maravillosos y llenos de secretos. Pequeñas placas sobre las casas, cementerios o entre los adoquines de las calles recuerdan este pasado turbulento e inquietante. Cuando la ciudad comenzó a sentir la necesidad de expandirse, las restricciones de espacio impuesto por la orografía pantanosa del enclave y por el miedo a construir fuera de la muralla defensiva, obligó a comenzar la construcción de edificios residenciales con pisos a partir del siglo XVI en adelante. Esto generó multitud de accidentes que derivaron en la destrucción de parte de la ciudad, como el gran fuego de 1824, o en el diezmo de la población a causa de la expansión de enfermedades infecciosas.
El Palacio de Holyrood House fue conocida largo tiempo como “Holy Ruid” (cruz sagrada en escocés) y dio paso a un palacio de estilo barroco que podemos contemplar y visitar hoy en día, que sigue siendo propiedad y lugar asiduo de visita de la monarquía británica. En su interior se guardan algunos de los objetos y curiosidades más importantes de Edimburgo, como es la real colección de tapices, las series de cuadros del siglo XVII o los aposentos y objetos de la reina más famosa de Escocia, María Estuardo, Reina de los Escoceses.
El Cementerio de Greyfriars (Greyfriars Kirkyard): podemos encontrar tumbas desde el siglo XVI hasta el XIX y alberga un buen número de sepulturas de personajes notables de la ciudad. El nombre viene directamente de la orden monacal a la que pertenece, la de los franciscanos: “Greyfriars” significa literalmente “frailes grises”. No te pierdas la tumba del perrito Bobby, según la historia oral, este pequeño Skye Terrier que, tras la muerte de su amo, decidió custodiar lealmente su tumba durante los 14 años que le quedaban de vida.
Entre diversas montañas de las populares Tierras Altas escocesas, antiguo hogar de los clanes familiares que poblaban esta región, descubriremos el impresionante Lago Ness. Es una lengua de agua oscura, con 23 kilómetros de longitud y más de 230 metros de profundidad, que desemboca en el mar. Es el segundo lago más extenso de Escocia, después de Loch Lomond. Sin embargo, por su impenetrable profundidad, es el de mayor volumen de todas las islas británicas.
Sin embargo, este lago no está aislado, en esta región, conocida como el Great Glen (o gran valle), es una concatenación de lagos o lenguas de agua que conectan la parte occidental de Escocia, desde Fort William, hasta su parte este, en Inverness. Más allá del escenario natural bañado por este lago, este enclave es mundialmente conocido por la supuesta criatura que lo habita: el Monstruo del Lago Ness o “Nessie”. Pese a las diversas descripciones, según las fuentes, esta historia se esparció por todo el mundo por una supuesta fotografía en el año 1.993, que hoy en día se considera como montaje. Sea como fuere, los avistamientos de criaturas prehistóricas en el Lago Ness se han sucedido a través de los siglos y dotan a esta zona, ya de por si, misteriosa e inquietante, con más elementos para quererla descubrir y emitir un juicio por nosotros mismo. El lago baña los pies del Castillo de Urquhart. No se sabe exactamente cuándo se construyó. Sin embargo, hay partes de la estructura datadas entre el siglo V y VI por carbono 14. Diversos clanes y familias se han atribuido la propiedad del castillo a través de los siglos, como la familia Durward en el siglo XIII, el clan Chisholm en el XIV o los MacDonald en el XVI. Lamentablemente, el castillo fue parcialmente destruido en 1692 por los ingleses y nunca ha sido reconstruido. Así que lo que se puede visitar hoy en día son las ruinas.
“Nessie” es un fenómeno viral en Internet. Cada mes se producen más de 200.000 búsquedas en Google. Existe un club oficial de amigos del monstruo que cuenta con aproximadamente 400 miembros. Se han documentado más de 1.000 “avistamientos” de este ser, con descripciones que varían enormemente. El año 2004 fue el año con mayor número de avistamientos.
Los rumores sobre la existencia de un monstruo en el lago han estado en circulación durante casi 1.500 años. La referencia más antigua se encuentra en la “Vida de San Columba”, del año 565, en el cual se menciona que una persona estaba siendo atacada por un misterioso ente en las proximidades del lago.
El Canal de Caledonia es una obra de ingeniera de primer nivel. Es una vía navegable que conecta la costa este de Escocia en Inverness con la costa oeste en Corpach, cerca de Fort William.
Se construyó en el siglo XIX por el ingeniero escocés Thomas Telford y recorre algo menos de 100 kilómetros. Cabe mencionar que la topografía de la zona lo puso fácil, ya que solo un tercio del canal ha sido construido por el hombre. El resto está constituido por los lagos Dochfour, Ness, Oich y Lochy. Esta zona de grandes lagos es llamada Great Glen o gran valle. El Canal está compuesto por 29 esclusas, 2 acueductos y 10 puentes. Las esclusas abren paso a los barcos que navegan a través de sus aguas varias veces al día y resulta todo un espectáculo.
El canal está atado a un pasado que poco tiene que ver con el esplendor innovador que representa. Durante los años en que el Canal era apenas un proyecto sobre papel y con escasos fondos, las Tierras Altas escocesas vivieron uno de los capítulos más tormentosos de su historia. A raíz de la estrepitosa derrota en la Batalla de Culloden, los ingleses impusieron el final de la cultura Highland o de Tierras altas, por el que se prohibía hablar gaélico, vestirse con los trajes típicos de clanes (los típicos estampados a cuadros que permitían a las familias reconocerse entre sí), tocar la gaita y, en muchos casos, los clanes se quedaron sin hogar y sin tierras. Algunos migraron a Canadá, a Estados Unidos o a algún otro punto de Escocia. Sin embargo, para los que se quedaron, la construcción del canal fue una fórmula para trabajar en un Mercado laboral que, en esa zona, quedo muerto. Esto permitió que el tráfico marítimo se abaratase mucho, ya que, en lugar de navegar alrededor de la isla británica, esta podía cruzarse rápidamente y con un coste mucho menor.
¿Has visto la película de Braveheart? Recordarás la batalla final entre las tropas gubernamentales y los aguerridos escoceses… pues bien, el lugar donde históricamente sucedió ese capítulo inolvidable por la independencia escocesa fue precisamente aquí, en Stirling, sobre el puente de Stirling o Stirling Bridge.
Corría el 11 de septiembre de 1297, cuando las tropas escocesas de William Wallace y Andrew de Moray derrotaron contundentemente a los ingleses. Los ingleses contaban con una absoluta superioridad numérica y tecnológica y, sin embargo, fueron abatidos en este épico combate. Y desde entonces, William Wallace es considerado héroe nacional y el puente donde todo ocurrió es hoy uno de los puentes más carismáticos de Escocia. A escasa distancia se encuentra el Castillo de Stirling, una fortificación de corte medieval y dimensiones brutales. Dada la función defensiva del mismo, se construyó sobre la colina que preside la ciudad de Stirling durante el siglo XII. Durante los siglos siguientes, el Castillo de Stirling presidió desde su ubicación privilegiada duras batallas y conflictos armados entre escoceses y británicos en los campos y llanuras que lo rodean. Las partes del castillo que actualmente están abiertas al público datan del siglo XVI y XVII y son un ejemplo exquisito de arquitectura renacentista. Desde el castillo, podrás divisar una hermosa torre victoriana, que hoy en día es el monumento a William Wallace, líder escocés y héroe nacional por antonomasia.
El Castillo de Stirling fue residencia real a partir de 1216 y solo dejó de ser un emplazamiento militar en el 1964.
Stirling también es famoso por sus muchos fantasmas, como la Dama Rosa del Castillo, quien ha sido vista por varios soldados a través de los siglos. Y la llamada “Lady Green” o mujer de verde, se dice que el espíritu que deambula por el castillo pertenece a una criada de la reina María Estuardo.
Compitiendo con otras grandes mecas del arte a nivel internacional, Glasgow ha ido consagrando su papel dentro de la escena creativa, con más de 20 galerías de arte y museos de gran envergadura, así como exhibiciones y colecciones menores repartidas por toda la ciudad.
Tanto si lo tuyo es el arte clásico como creaciones innovadoras más de tendencia, la oferta de Glasgow resulta inabarcable, ya que puedes pasar incontables días recorriendo sus rincones dedicados al arte. SI no dispones de mucho tiempo, puedes visitar las maravillosas colecciones del Kelvingrove Art Gallery And Museum, con obras de Rembrandt, Monet, Renoir, Pissarro o Van Gogh, entre otras 8.000 piezas. Por su parte la Galería de Arte Moderno (GoMA) es un destino preferente, si te gusta el arte contemporáneo, de David Hockney o Andy Warhol. En sus colecciones, se incluyen diversas piezas ganadoras de premios Turner. La Burrell Collection compila 8.000 objetos del filántropo escoces Sir William Burrel (1861 – 1958), quien compiló antigüedades de medio mundo y obras de un valor incalculable. Cabe destacar la galería de arte medieval, de arte chino e islámico, piezas de civilizaciones antiguas y obras maestras de Rodin, Degas o Cezanne. Comedia, danza, diseño, innovación gastronómica, improvisación musical, teatro, artes visuales... Glasgow es esto y mucho más. Déjate sorprender por una de las ciudades más jóvenes, innovadoras, creativas y vibrantes de Europa.
Glasgow tiene un apretado calendario de Festivales y mercadillos temáticos. Infórmate antes de planificar tu viaje para no perderte nada. Piensa si quieres incorporar la visita a un museo o galería de arte a tu viaje. Y si eres estudiante o jubilado, lleva tu tarjeta o credencial siempre contigo. Encontrarás muchas ofertas especiales para estos colectivos. Aprovéchalas.
El plan de viaje a tu alcance
- Cena
- Edimburgo
- Desayuno. Almuerzo
- Edimburgo
- Panorámica de Edimburgo
- Desayuno. Almuerzo. Cena
- Inverness
- Desayuno. Almuerzo. Cena
- Thurso
- Desayuno. Cena
- Orkney
- Thurso
- Desayuno. Cena
- Fort William
- Desayuno. Almuerzo. Cena
- Stirling
- Glasgow
- Castillo de Stirling (entrada incluida)
- Panorámica de Glasgow
- Desayuno.
- Glasgow
¿Quieres saber más de Escocia?
La gastronomía escocesa es el resultado de la dilatada historia de estas tierras; de la influencia de costumbres populares locales, muchas de ellas centenarias, y otras llegadas desde diferentes territorios del mundo. Razón, por la que no es extraño encontrar en una misma carta de restaurante platos tradicionales y otras propuestas influenciadas por los fogones europeos, asiáticos o americanos. La proximidad al océano Atlántico nutre a la cocina escocesa de excelentes y frescos pescados. Sus fértiles espacios naturales y montañas libres de polución permiten que en Escocia se coma una de las mejores carnes del mundo. No te pierdas la carne de Aberdeen Angus, la morcilla de Stornoway, el pescado de Arbroath y el salmón de las Shetland...
Escocia agasaja a los viajeros con las deliciosas propuestas tradicionales propias del Reino Unido y platos locales tan afamados y deliciosos como los famosos haggis, una especie de morcilla que te sorprenderá por su sabor y que suele ir acompañada con legumbres y verduras. Además de las cervezas y el té, Escocia es conocida mundialmente por su excelente whisky escocés, uno de los mejores del mundo. Y para los que quieran un capricho dulce, nada mejor que degustar unas caseras galletas de mantequilla.
Escocia es también un excelente destino de compras. Ya sea en grandes ciudades o en sus encantadores pueblos, sus comercios tradicionales y excelentes boutiques -repletas de originales diseños locales y piezas de cerámica únicas- son siempre un buen reclamo para los amantes de las compras.
¿Claves para encontrar el regalo perfecto? Pon rumbo a las tiendas de alimentación y espacios gourmet donde podrás adquirir los excelentes productos locales que tanta fama han dado a su cocina. Mermeladas, té, galletas de mantequilla, whisky escocés… Además, sus ferias y mercados son famosas en todo el Viejo Continente por sus excelentes productos, originales diseños y muebles vintage. Finalizamos esta lista de la compra añadiendo sus magníficas joyas, sus piezas de alfarería, las obras de arte que cuelgan de las paredes de inspiradoras galerías y, cómo no, con sus excelentes mantas, con los clásicos abrigos Barbour, con las típicas chaquetas y calcetines de cuadros escoceses y su legendaria falda escocesa.
•1 de enero: Día de Año Nuevo
•2 de enero
•Viernes Santo
• 4 de mayo: Early May Bank Holiday
•29 de mayo: Spring Bank Holiday
•7 de Agosto: Summer Bank Holiday
•30 de noviembre: Día de San Andrés
•25 de diciembre: Navidad
•26 de diciembre: Boxing Day