Viaje a Estados Unidos: Circuito Encantos del Este

Día 1: España - Boston. Primer día en Estados Unidos

Hacemos un último repaso al equipaje antes de salir de casa. El taxi nos espera para llevarnos al aeropuerto y los nervios nos traicionan, pero llegamos a tiempo para nuestro vuelo con destino Boston. Nos acomodamos en el asiento del avión y en pocas horas sentimos como empezamos a descender hacia nuestro destino.

Hemos cruzado el charco y, por fin, podemos afirmar que ya estamos en suelo americano. Pasamos los controles típicos de Estados Unidos, recogemos las maletas y un automóvil nos lleva hasta nuestro hotel, el llamado Hilton Boston Woburn. Tras deshacer un poco el equipaje y asearnos salimos a la calle a pasear un poco por el centro. Estamos deseando que llegue el día de mañana por hacer el ansiado tour guiado.

Día 2: Boston. Conociendo Boston

Probamos nuestro primer desayuno americano, que nos parece delicioso. Tras comer varias tortitas con sirope de arce y huevos revueltos estamos más que listos para iniciar nuestra aventura por la ciudad de Boston, capital del estado de Massachusetts. Saldremos temprano en un tour guiado panorámico para quedarnos con la esencia de esta ciudad conocida como la capital de la Nueva Inglaterra.

Vamos a recorrer célebres lugares como el barrio de Back Bay, donde disfrutaremos de las bonitas calles empedradas y las fachadas de estilo victoriano tan característico de la época de colonización. En plena plaza Copley Square, en este mismo barrio se encuentra la famosa iglesia de la Trinidad del año 1877 y también los centros comerciales y mercado de Faneuil Hall y Quincy Market, dos importantes centros comerciales de la ciudad que conservan su arquitectura de otros tiempos con todo el carácter de los primeros años de la ciudad de Boston.

Veremos también otros recintos religiosos como la Iglesia Científica de Cristo, sede del restauracionismo y creada en el año 1879 o el museo de Bellas Artes, una de las instituciones culturales más relevantes del país al contar con la segunda colección permanente más grande de EE.UU. Este museo contiene joyas de Egipto, pintura impresionista, cerámicas japonesas y otras grandes obras.

Además, iremos a conocer la importante Universidad de Harvard, que podríamos decir que es la universidad más famosa del planeta. De hecho, por este centro de formación superior han pasado grandes figuras como Bill Gates o Barack Obama.

Por último, nuestra visita guiada finalizará en el Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT), considerada actualmente la mejor entidad educativa del mundo, según el QS World University Ranking.

El resto de la tarde la tendremos libre para seguir recorriendo la ciudad y viendo otros lugares emblemáticos. Por la noche caeremos rendidos en la habitación de hotel. El jet lag sigue notándose un poco, aunque sabemos que sin darnos cuenta nos habremos acostumbrado al cambio horario.

Día 3: Boston - Quebec. Ponemos rumbo a Quebec

En esta parte del viaje debemos abandonar Estados Unidos, donde volveremos para finalizar nuestras vacaciones. Pero de momento le decimos adiós a Boston porque Canadá nos espera con los brazos abiertos.
Después de traspasar los montes Apalaches, una inmensa sierra que atraviesa prácticamente toda la parte este de América del Norte, la ciudad de Quebec nos dará la bienvenida.

Llegaremos a esta preciosa localidad a media tarde, por lo que tendremos tiempo de dar una vuelta por allí y empezar a conocer algunos de sus monumentos más significativos. Quebec dispone de un casco antiguo con muralla, una peculiaridad única en toda Norteamérica. Pero no nos tenemos que preocupar por verlo todo ya que mañana contaremos con un tour guiado gracias al que no perderemos detalle de la ciudad.

Día 4: Quebec City - Montreal. La ciudad amurallada

El jet lag va desapareciendo. Cuando estemos listos saldremos a conocer la ciudad considerada como la más francesa de Canadá. Su casco antiguo, la Citadelle, es una delicia para callejear ya que es la última ciudad amurallada que queda en todo el norte del continente americano.

Poco a poco nos iremos contagiando de esta atmósfera francesa y disfrutaremos de un agradable día conociendo el Chateau de Frontenac, el edificio más emblemático de Quebec construido en el año 1893 y hoy en día reformado como un prestigioso hotel junto al río, la Universidad de Laval, que data del año 1663, o la terraza Dufferin, donde podremos admirar un increíble atardecer caminando sobre su bonito paseo. Haremos una parada para comer y después iremos al hotel a buscar las maletas.

Esta tarde saldremos rumbo a Montreal, donde dormiremos.

Día 5: Montreal. Una ciudad siempre a la última

Montreal nos da hoy los buenos días. Nos llenamos de energía con un rico desayuno y salimos a la calle para descubrir la ciudad. Iremos en un tour guiado que iniciará su recorrido por el barrio inglés de Westmount. Podremos ver la belleza del Oratorio San José y caminaremos por el parque hasta el mirador del Chalet de la Motana. Si el clima lo permite, además visitaremos el mirador del Belbedere.

En el distrito federal y comercial, disfrutaremos viendo la Universidad de McGill, en la que las carreras se dan inglés, a diferencia del resto de universidades de la ciudad, el Estadio de los Juegos Olímpicos de 1976, así como la red subterránea más grande del mundo, RÉSO, que conecta bajo tierra residencias, universidades y centros comerciales.

Durante los meses de invierno este lugar es de gran practicidad para los canadienses que allí residen ya que les facilita hacer las compras, ir a cenar, e incluso y a ver alguna obra de teatro o cine. La RÉSO cuenta con 30 kilómetros de extensión por lo que se considera casi como una ciudad bajo tierra. Esta red nació en 1962, tras la construcción del edificio de Plaza Ciudad Marie.

Continuaremos hacia el viejo Montreal, pasando por la Plaza de la Reina Victoria, y, bordeando el perímetro del viejo Montreal y el viejo Puerto, pondremos rumbo hacia la plaza de armas para admirar desde el exterior la basílica Notre Dame. Finalmente caminaremos hasta el edificio del ayuntamiento, donde se encuentra la plaza Jacques Cartier, corazón turístico del viejo Montreal. Tras las actividades programadas, tendremos el resto de la tarde libre para descubrir esta atractiva localidad a nuestro aire.

Al finalizar la jornada podremos regresar al hotel y reponer fuerzas. ¡Buenas noches!

Día 6: Montreal - Ottawa - Toronto. Navegando por el río Saint Lawrence

Cada ciudad que visitamos de Canadá nos enamora y nos cuesta cada vez más despedirnos de este fascinante territorio. Tras desayunar saldremos temprano en dirección a Ottawa. En la capital del país, designada así en el año 1857 por la reina Victoria de Inglaterra, conoceremos el Parlamento, las mansiones del gobernador y primer ministro, entre otros edificios y monumentos históricos.

Al finalizar la visita guiada nos subiremos al vehículo de nuevo para ir hacia Brockville, situado aproximadamente a una hora en coche. Desde allí zarpa nuestro crucero por las Mil Islas, un archipiélago digno de visita que se encuentran en el canal de agua dulce más largo del planeta, el río Saint Lawrence, que bebe de los Grandes Lagos de Norteamérica.

Después de disfrutar del paisaje y hacer fotos a las bonitas casas y palacios de estos 1.700 islotes, como el castillo de Boldt, daremos por finalizada la aventura en barco. Será después de este interesante crucero cuando pongamos rumbo a Toronto. La ciudad más grande de Canadá nos está esperando con los brazos abiertos. Una vez en nuestro destino, podremos reponer fuerzas en el hotel.

Día 7: Toronto - Niagara Falls. Las cascadas más populares

Por la mañana tendremos ocasión de recorrer algunos puntos importantes de Toronto como su Parlamento provincial, ubicado en Queens Park, la Universidad de Toronto, que es la más grande de Canadá y cuenta con una de las más prestigiosas escuelas de periodismo, o Toronto City Hall, un enorme rascacielos donde se encuentra el ayuntamiento de esta urbe. Además, también visitaremos el barrio bohemio de Yorkville o la torre CN, la torre de radiodifusión más alta de toda América.

Continuará el viaje por carretera hacia Niagara on the Lake. Este pequeño pueblo digno de visita fue una vez capital del Alto Canadá. Recorreremos sus pintorescas calles en un agradable paseo. El resto del día lo dedicaremos a las espectaculares cataratas del Niágara, que podremos ver desde el río a bordo del barco Hornblower, o desde lo alto en su observatorio, Table Rock. Allí también encontraremos el famoso reloj floral, uno de los más grandes del mundo y un antiguo teleférico español al que se conoce como Spanish aerocar, y que también ofrece unas bonitas vistas de la zona. Otra opción de ver las terceras cataratas más altas del mundo será también ir por los túneles escénicos y observarlas desde la parte de atrás.

Cuando termine el día nos costará dormirnos de la emoción de haber estado tan cerca de estas populares cascadas, pero poco a poco iremos conciliando el sueño. Tenemos que coger fuerzas porque mañana nos espera la Gran Manzana.

Día 8: Niagara Falls - Nueva York. Nueva York nos espera

Las cascadas del Niágara nos han dejado realmente impresionados y poco a poco somos conscientes de que el viaje se está terminando. Pero al recordar lo que nos espera al final del día de hoy nos vemos a sentir contentos.

Hoy pasaremos la noche en Nueva York, ciudad que recorreremos en un tour al día siguiente. Cuando lleguemos a nuestro destino, tras tantas horas de autobús, podemos descansar en el hotel o salir a la calle a disfrutar del tan especial ambiente neoyorquino, seguro que no nos defrauda ni lo más mínimo.

Día 9: Nueva York. Paseando entre rascacielos

Es difícil no haber pensado alguna vez que somos el protagonista de tantas películas rodadas en la ciudad de Nueva York. Estamos como en un sueño que pronto se va a hacer realidad cuando empecemos nuestro recorrido guiado que cuenta con una increíble ruta por Manhattan, conociendo algunos de los edificios más importantes de la Gran Manzana como son el Empire State, que fue el más alto del mundo hasta ser destronado en la década de los setenta o el Flatiron Building, con su particular forma ondulada y sus más de cien años de antigüedad.

También podremos ver desde el emblemático Battery Park, el gran regalo que le hizo el gobierno francés a los Estados Unidos por el centenario de la declaración de independencia del país, la Estatua de la Libertad, y que representa, como su nombre indica, el cese de la opresión. Perderemos algunas horas en el parque de Central Park, el inmenso pulmón de esta urbe con 4 kilómetros de largo y 800 metros de ancho.

Es una delicia pasear por sus zonas ajardinadas, sentarse a la sombra de un árbol en verano o atreverse a patinar en su pista de hielo durante los meses de invierno. En Central Park se encuentra además un monumento que se hizo en homenaje al Beatle John Lennon tras su asesinato en la entrada del edificio Dakota, donde residía. Este memorial se llamó Strawberry Fields. Además, pasaremos por museos de altísimo nivel como son el Metropolitan, el Frick o el Guggenheim, que veremos desde fuera.

Sin olvidar la visita a los grandes barrios de Nueva York. Entraremos en el Soho, la zona de tiendas, bares y clubes más chic. También veremos como cocinan la pasta en la encantadora Little Italy, además de trasladarnos a la auténtica China de China Town.

Día 10: Nueva York - España. Volvemos a casa

Mientras recogemos el equipaje pensamos en todo lo que hemos vivido estos días. Nos llevamos un montón de recuerdos en el corazón que nos acompañarán para siempre. La costa este de Norteamérica nos ha sorprendido gratamente y estamos deseando volver.

Empezamos a planificar nuestro próximo viaje mientras nuestro vuelo despega, en pocas horas estaremos de nuevo en casa con nuestros amigos y familiares. A pesar de que todos ellos han seguido nuestra aventura a través de Instagram, están esperando impacientes nuestro relato.

Día 11: España.

El viaje llegó a su fin. Otra vez en casa después de una fantástica experiencia que desearás volver a repetir.