Viaje a Turquía: Circuito Estambul y Capadocia

Día 1: España – Estambul. Nos ponemos en marcha con destino a Turquía

Hoy comienza un maravilloso viaje que nos permitirá conocer algunos de los enclaves más asombrosos, divertidos y estimulantes de ese gran país llamado Turquía. Cuando llegue la hora convenida, nos dirigiremos al aeropuerto, teniendo en cuenta que debemos estar allí con al menos dos horas de antelación respecto a la hora de salida de nuestro vuelo. A lo largo del trayecto, podremos repasar todas las increíbles visitas que estamos a punto de realizar, y de todas las experiencias viajeras que estamos a punto de vivir…

Nada más aterrizar en el aeropuerto internacional de Estambul, seremos recibidos con todos los honores, e inmediatamente trasladados a nuestro primer hotel. Allí podremos registrarnos, instalarnos y refrescarnos para, a continuación, disponer de tiempo libre hasta el final de la jornada. Así podremos tomar un primer contacto con esta maravillosa ciudad, llamada Bizancio y Constantinopla en el pasado, y en la actualidad mezcla de culturas y bisagra entre Asia y Europa. Cuando el día esté tocando a su fin, regresaremos al hotel para disfrutar de nuestra primera noche de descanso en territorio turco. ¡Hasta mañana!

Día 2: Estambul. Un recorrido esencial por lo mejor de la ciudad

¡Por fin ha llegado el momento de recorrer los lugares más emblemáticos de Estambul! Lo haremos a través de una inolvidable visita panorámica, que dará comienzo en cuanto terminemos de desayunar en el hotel. Tenemos ante nosotros la maravillosa oportunidad de conocer varios de los enclaves que han hecho de esta ciudad una de las más visitadas de todo el mundo. Antiguamente conocida como Bizancio, y posteriormente como Constantinopla, Estambul no solo es la ciudad más grande de Turquía y una de las más grandes de Europa, sino que además constituye el centro cultural y económico del país, y ha sido, históricamente, el nexo de unión entre Asia y nuestro continente.

El primer lugar que iremos a conocer es el famosísimo Bazar de las Especias, que también recibe el nombre de Bazar Egipcio, porque antiguamente la mayoría de las mercancías que se vendían aquí llegaban en barco desde ese país del norte de África. Se trata de uno de los mercados más antiguos de Estambul, ya que fue construido en el Siglo XVII, y se halla junto a la Nueva Mezquita. Este bazar es una visita obligada para todos los viajeros que pasan por la ciudad, y una vez dentro, resulta difícil encontrar el momento de salir. Los aromas exóticos de mil y una especias, frutas frescas, frutos secos y platos elaborados, así como el ambiente que se respira, y la frenética actividad comercial de su cientos de puestos cautivan al visitante y le transportan a un mundo de ensueño, detenido en el tiempo.

A continuación, iremos a visitar Santa Sofía, un gigantesco templo que se ha convertido en uno de los símbolos más reconocibles de Estambul. Fue construida en el año 537 como iglesia cristiana, y está considerada la obra más grande e importante de la época bizantina. Durante casi un milenio, hasta 1453, siguió siendo una iglesia, pero cuando el Imperio Otomano conquistó la ciudad la convirtió en una mezquita. Habría que esperar otros cinco siglos para que Mustafá Kemal Ataturk, padre fundador de la República Turca, la restaurara y la transformara en un museo en 1935. Hoy en día, sigue siendo una construcción imponente, y se encuentra entre los mayores templos del mundo. Su espectacular cúpula, visible desde muchos puntos de la ciudad, es su elemento más característico y fotografiado.

Para culminar nuestra visita panorámica por lo mejor de Estambul, tomaremos un barco que nos llevará a dar un inolvidable paseo por el Bósforo, el estrecho que separa las dos partes de la ciudad: la europea y la asiática. De este modo, podremos admirar los contrastes entre las dos caras de Estambul, hacernos una idea de la grandeza de esta urbe, y contemplar los ‘yales’, las célebres casas de madera que se encuentran en la orilla.

Una vez que hayamos finalizado nuestro tour panorámico, almorzaremos y tendremos tiempo libre durante el resto del día, que podremos invertir en ir de compras, visitar alguno de los museos de la ciudad o pasear tranquilamente por las siempre animadas calles de Estambul. A la hora de dormir, regresaremos a nuestro hotel para pasar la noche.

Día 3: Estambul. Visitas para el recuerdo en la gran Estambul

Un nuevo día de nuestro gran viaje a Turquía comienza, y lo recibiremos del mejor modo posible: con un fabuloso desayuno en el hotel. En cuanto terminemos, ya con la tripa llena y repletos de energía, emprenderemos un recorrido por tres lugares maravillosos que ayer no pudimos visitar en nuestro tour panorámico por Estambul.

El primero de ellos es el Palacio Topkapi, un enorme y precioso conjunto palaciego que se encuentra entre los más grandes del planeta. Cuenta con más de 700.000 metros cuadrados de superficie, y es el lugar desde el que los sultanes del Imperio Otomano gobernaban todo su territorio. Durante siglos, el Palacio Topkapi fue el punto del que emanaba el casi infinito poder de los sultanes otomanos, y el increíble tesoro que se custodia en su interior es buena muestra del lujo y la majestuosidad con que vivían. En sus innumerables salas y estancias se pueden ver tapices de gran belleza, alfombras de un valor incalculable y un sinfín de obras de arte provenientes de todos los rincones del mundo. Pero es que, además, hay algunos objetos tan llamativos y exclusivos que tienen la capacidad de dejar boquiabierto incluso a los viajeros más experimentados. Por ejemplo, el Diamante del Cucharero, que perteneció a la madre de Napoleón Bonaparte, o el Puñal Topkapi, fabricado en oro y esmeraldas, que está considerada el arma más cara del mundo.

Tras nuestro paso por el Palacio Topkapi, nos dirigiremos al Hipódromo, que se halla en Sultanahmet, uno de los barrios más populares y visitados de Estambul. Este lugar fue mandado construir alrededor del año 200 por el emperador Constantino, considerado el fundador de la ciudad, y fue el epicentro de la vida social y cultural de Estambul durante siglos. Aquí no solo se celebraban carreras de carros y de caballos, sino que era el enclave donde tenían lugar la mayoría de los actos oficiales, fiestas populares y eventos deportivos de la ciudad. En el Hipódromo todavía se conservan los restos de algunas construcciones de la época, como la Columna Serpentina, el Obelisco o la Columna de Constantino.

Una visita completa a Estambul no podría dejar a un lado el Gran Bazar, así que después de conocer el Hipódromo nos dirigiremos allí. Se trata del mercado más grande de la ciudad (de hecho es uno de los mayores del planeta), y cuenta con más de 4.000 tiendas distribuidas en 58 calles. Se halla en la Ciudad Vieja, en la parte europea de Estambul, y entre sus puestos y comercios es posible encontrar cualquier mercancía a cualquier precio. Sin duda, una experiencia de lo más recomendable…

Hoy, igual que ayer, dispondremos de toda la tarde libre una vez que hayan concluido las actividades matutinas. Puede ser el momento perfecto para pasear por alguna de las plazas del centro de Estambul, como la famosa Taksim, de comprar algún regalo para la familia o de volver a visitar cualquiera de los lugares que nos han dejado huella durante las jornadas anteriores. Hagamos lo que hagamos, cuando caiga la noche volveremos al hotel para disfrutar de una merecida noche de descanso.

Día 4: Estambul – Capadocia. Rumbo a una tierra insólita

Para poder continuar con nuestro maravilloso viaje por Turquía, no nos queda más remedio que decir adiós a la maravillosa ciudad de Estambul. Una vez que terminemos de desayunar en el hotel, recogeremos nuestras cosas y seremos trasladados al aeropuerto Ataturk. Allí tomaremos un vuelo doméstico con destino a la insólita región de Capadocia, ubicada en la parte central de la Península de Anatolia, y célebre por sus curiosas y sorprendentes formaciones geológicas. Durante las próximas jornadas disfrutaremos de lo lindo con sus paisajes, sus espacios naturales, sus iglesias rupestres y sus viviendas excavadas en la roca.

Cuando aterricemos en Capadocia, lo primero que haremos será reponer fuerzas con un buen almuerzo y, a continuación, tomaremos un primer contacto con esta insólita región visitando la villa de Avanos, famosa por ser el lugar donde se celebra un animado y popular mercadillo de cerámica. Después, nos dirigiremos a la Fortaleza de Uchisar, ubicada en medio del valle del mismo nombre. Este asombroso lugar es, en realidad, una colina en la que, a lo largo de los siglos, se fueron excavando cientos de túneles, viviendas y galerías. Esta ciudad troglodítica cavada en la roca estuvo habitada hasta hace poco, pero los riesgos de desprendimiento forzaron que sus habitantes fueran realojados.

Tras estas dos sorprendentes visitas, seremos trasladados al hotel de Capadocia y tendremos tiempo libre. Quien lo desee, podrá contratar una excursión opcional para asistir a un show de danzas folclóricas en una cueva, que incluye una consumición. Finalmente, iremos de nuevo al hotel para cenar y pasar la noche.

Día 5: Capadocia. Descubriendo la naturaleza más extraordinaria de Turquía

La bella Capadocia, un lugar mágico, lleno de lugares sorprendentes, todo un sueño. Pues hoy la vamos a investigar tranquilamente. Lo primero será degustar un buen café turco con sus correspondientes acompañantes para gozar del desayuno matutino. Nos preparamos con ropa cómoda ya que hoy la mayoría de las visitas van a ser al aire libre y rodeados de una naturaleza increíble.

El primer paseo que demos será por un parque natural de Göreme, una auténtica delicia para los sentidos. Aire puro y unas estructuras geológicas que quitan el hipo, este parque es un auténtico museo al aire libre. Lo más curioso de todo es que entre sus muros y acantilado de piedra, aparentemente vacíos y sin vida, se avistan ventanitas y puertas ya que aquí habitó gente. Además también hay recintos religiosos donde algunas conservan frescos de gran valor artístico.

Después de esta experiencia viviremos otra, ya que visitaremos Ozkonak, una antigua ciudad subterránea construida en el año 400 a.C en la que llegaron a habitar más de 20.000 personas. Nos adentraremos en el subsuelo y descubriremos las casas de esta antigua urbe. También disfrutaremos de una inolvidable visita al Valle de Caza, y culminaremos esta mañana repleta de emociones con un buen almuerzo.

Por la tarde tendremos tiempo libre para seguir disfrutando de Capadocia y de sus insólitos paisajes. Es importante destacar que, a lo largo del día, tendremos la posibilidad de realizar una actividad opcional de esas que marcan un antes y un después en cualquier viaje. Se trata de dar un paseo en globo aerostático para disfrutar, desde la mejor perspectiva posible, de los increíbles paisajes de Capadocia.

Cuando la jornada esté tocando a su fin, regresaremos a nuestro hotel para disfrutar de una suculenta cena y de una merecida noche de sueño reparador.

Día 6: Capadocia – España. Se acabó este viaje, pero tal vez…

Una sensación agridulce nos embargará hoy al despertar. Agria porque sabemos que es nuestra última jornada en Turquía, y que no nos queda más remedio que volver a España. Y dulce porque a lo largo de los últimos días hemos atesorado un gran número de vivencias, emociones y experiencias irrepetibles en este maravilloso país.

Después de disfrutar de nuestro último desayuno en suelo turco, tendremos algo de tiempo libre hasta que llegue el momento de dirigirnos al aeropuerto para tomar un vuelo a Estambul. Una vez allí, conectaremos con otro que nos llevará de regreso a casa.

Ha sido un viaje extraordinario, durante el que hemos vivido grandes experiencias que nos acompañarán para siempre en forma de recuerdos imborrables… Ahora solo queda esperar a que llegue el día de emprender el siguiente. ¡Hasta pronto!