Día 3: Vilnius - Colina de las Cruces - Rundale - Riga. Cruces y... A Letonia
RÉGIMEN
Desayuno. Almuerzo. Cena
Transporte
Autocar, minibús o van
Visitas
Palacio de Rundale
Nuestra primera parada de hoy es la Colina de las Cruces, importante lugar de culto católico, con cruces erigidas desde el siglo XIV. Nos dirigiremos allí una vez que hayamos terminado de dar buena cuenta de nuestro desayuno en el hotel de Vilnius.
A finales de la época soviética, esta colina contaba con más de 40.000 cruces. Durante décadas ha sido un lugar de peregrinaje para los católicos pero, sobre todo, un símbolo de la independencia lituana, alcanzada finalmente en 1991. Se calcula que hoy en día las cruces que se erigen en este lugar podrían superar las 200.000.
Seguidamente atravesaremos la frontera con Letonia para llegar al Palacio de Rundale, construido a mediados del siglo XVIII por los duques de Curlandia, cuando lo que hoy es Letonia formaba parte del Gran Ducado de Lituania. El diseño es obra del arquitecto Francesco Bartolomeo Rastrelli, famoso por ser el artífice de impresionantes edificios como el Palacio de Invierno de San Petersburgo.
Almorzaremos en Rundale y, a continuación, realizaremos una interesantísima visita al interior del palacio. Se dice de esta edificación que es uno de los palacios más espectaculares de Letonia. Las diferentes estancias nos dan una idea del magnífico gusto y la afición al lujo de los Duques de Curlandia. Son dignos de visita el Salón Dorado en el que encontramos el trono del duque. Impresionan los ornamentos de estuco dorado y los frescos que adornan el techo. La Sala Holandesa está decorada con obras de importantes artistas de los Países Bajos, entre los que destaca Rembrandt.
Los jardines del Palacio, diseñados a imagen y semejanza de Versalles, en distintos ambientes, invitan a perderse por ellos y disfrutar con el parterre simétrico, el jardín de las rosas y el teatro realizado con terrazas de hierba verde en la que el duque se entretenía con las funciones que se organizaban para su divertimento.
Y después de este interesante día, tomamos camino a Riga, la capital de Letonia, donde podremos cenar y retirarnos a descansar.