Viaje a Portugal: Circuito Lo mejor de Portugal y Madeira

Día 1: España – Lisboa. Comienza el viaje… Primera parada, la gran Lisboa

Poco a poco, el gran día ha llegado, por lo que, cargados de ilusión, nos dirigiremos al aeropuerto (se recomienda llegar un par de horas antes, para realizar los trámites con calma). En muy poco tiempo, ya estaremos pisando tierra portuguesa, con Lisboa, la capital, como punto de partida de este fascinante recorrido que finalizará en Funchal, la capital de Madeira.

Al aterrizar en Lisboa no estarán esperando para trasladarnos a nuestro hotel en esta incomparable ciudad, donde al terminar el día, nos alojaremos para aprovechar nuestra primera noche de descanso.

Antes de cerrar los ojos, impacientes por saborear cada una de las once jornadas, dispondremos de unas horas de tiempo libre para empezar a sentir Lisboa, una ciudad más antigua que Roma, ya que se han encontrado restos fenicios del 1.200 a.C. Tendremos la oportunidad de conocerla a fondo más adelante pero, antes, empezaremos a comprobar en primera persona por qué es una de las ciudades más apreciadas del continente europeo.

Día 2: Lisboa - Nazaré - Batalha - Aveiro – Oporto. Un excepcional camino, de Lisboa a Oporto

El desayuno en nuestro hotel lisboeta nos dejará preparados para emprender la salida hacia Nazaré, el que fuera pueblo de pescadores y que en la actualidad es uno de los principales centros turísticos del país, por sus excelentes playas, una de ellas, Praia do Norte, de fama mundial por ser, cada año, el escenario de ‘La ola más grande del mundo’. También podremos subir al Faro, ver la Iglesia de Nossa Senhora de Nazaré, etc.

De ahí viajaremos hasta la cercana Batalha, con tiempo libre para contemplar su monasterio, una magistral obra de arte correspondiente al estilo manuelino (con las mejores vidrieras de todo el país), considerada una de las siete maravillas de Portugal y reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Ya en Aveiro, en la costa Oeste y junto a la ría del mismo nombre, tendremos unas horas de tiempo libre, en las que podremos pasear por las calles y canales de la denominada popularmente ‘Venecia Portuguesa’ y donde se recomienda disfrutar de una travesía en un barco ‘moliceiro’, como una gran góndola (su nombre se debe a que estas embarcaciones trasladaban un alga del tipo ‘molico’). El Barrio Viejo (‘Beira Mar’) es otro de los enclaves por los que apreciaremos la belleza de esta localidad, antes de desplazarnos hasta Oporto, donde cenaremos y nos alojaremos en el hotel.

Día 3: Oporto. La magnífica Oporto

Desayunaremos en nuestro hotel para, después, comenzar una visita panorámica por el centro histórico de la ciudad, considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Un reconocimiento merecido por enclaves como la Plaza de la Libertad y la Avenida de los Aliados, con sus edificios modernistas (como el Ayuntamiento), la Iglesia de la Lapa, la Torre de los Clérigos, la Estación de San Bento… un recorrido que incluirá una visita a una bodega de vinos de Oporto y un paseo en barco por el río Duero, un excepcional cierre a una mañana de contacto directo con esta bella ciudad.

Durante la tarde libre, podremos seguir paseando por Oporto, o disfrutar de una excursión opcional a Braga, con un extraordinario casco antiguo y de gran interés cultural, tanto por su legado artístico e histórico como por ser ciudad universitaria. Y podremos conocer, muy cerca de la ciudad, el espectacular santuario de Bom Jesús do Monte (segundo centro religioso en importancia de Portugal después de Fátima), con su espectacular escalinata barroca y al que subiremos en funicular, con unas vistas de película. Una nueva noche de descanso en Oporto nos esperará.

Día 4: Oporto - Guimaraes - Valle Del Duero Central - Vila Real – Coímbra. Camino a Coímbra, con varias apasionantes escalas

Poco después de desayunar, dejaremos Oporto para conocer Guimaraes, la que fue cuna de Portugal, ya que cerca de ella se desarrolló, en 1128, la decisiva Batalla de São Mamede que, después de la paz de 1143 dio lugar a la nación portuguesa, con Alfonso Enríquez como primer rey. Un paseo por la Historia que nos aguardará, por ejemplo, en su centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Después iremos a Vila Real, fundada por campesinos y pastores y tierra de vinos como el Solar de Mateus, cuya finca y bodega (palacio barroco de mediados del siglo XVIII) visitaremos.

La desbordante belleza de la naturaleza portuguesa seguirá saliendo a nuestro encuentro durante la ruta por el corazón del Valle del Duero (el ‘Douro’), con filas y filas de viñedos en terrazas extendidas entre Pinhao y Peso da Régua, sobre las colinas que escoltan los márgenes del río. La jornada terminará con nuestra llegada a Coímbra, otra de las referencias urbanas en el país y uno de los centros universitarios más importantes, no solo de Portugal, sino de toda de Europa. Momento para cenar y disfrutar del alojamiento en el hotel, después de otro gran día de viaje.

Día 5: Coímbra – Fátima. Las inolvidables Coímbra y Fátima

Terminado el desayuno en nuestro hotel, llegará la hora de una interesante visita panorámica por Coímbra, en la que destacan, entre tantos otros, lugares como el Monasterio o Convento de Santa Clara la Nueva, donde podremos visitar la tumba de Santa Isabel, patrona de la ciudad.

Seguiremos nuestro recorrido tanto por la Parte Alta (o Almedina), la zona exclusiva de los aristócratas, clérigos y estudiantes en la Antigüedad como por la Baja, propia de los artesanos y comerciantes, pegada al río. Entre ambas, conoceremos los espléndidos patios de la universidad (su campus histórico también es Patrimonio de la Humanidad), la Capilla de San Miguel y la Biblioteca Joanina, para continuar paseando hacia la parte Baja, zona del comercio, los artesanos y los barrios junto al río.

Después de Coímbra, la ruta continúa a lo grande con nuestra llegada a la mundialmente famosa Fátima, la ciudad en la que los tres niños pastores (Lucía y sus primos Francisco y Jacinta Marto) vieron, en la Cueva de Iria el 13 de mayo de 1917, a la Virgen María (hubo seis encuentros). Fue el punto de partida de miles y miles de peregrinaciones a este entorno natural, en el que podremos disfrutar de tiempo libre para conocerlo mejor, con cena y alojamiento en el hotel de la ciudad.

Día 6: Fátima - Tomar - Óbidos – Lisboa. De Fátima hacia Lisboa, pasando por Tomar y Óbidos

Una vez que hayamos desayunado en Fátima, continuaremos nuestro recorrido histórico con nuestra llegada a Tomar, conocida como ´La ciudad de los templarios’, con hitos como el renacentista Castillo-convento del Cristo, en lo alto de la ciudad, legado tanto de la historia de los caballeros templarios como del esplendor de los navegantes lusos a lo largo y ancho del mundo, con celebridades como Enrique el Navegante.

El centro histórico, la Ermita de Nuestra Señora de la Concepción, la Praça da República, todo tipo de tiendas con productos de artesanía, café (Portugal es tierra cafetera), dulces como las ‘queijadas’ y las ‘fatias’ … un homenaje para los sentidos.

Otra buena noticia será la llegada a Óbidos, que nos volverá a imaginar los tiempos medievales, en una pequeña población que se encuentra entre las más visitadas del país y donde tendremos unas horas de tiempo libre. Podremos subir hacia el castillo, pasando por una continua subida por la calle principal, surcada por callejones en los que destacan todo tipo de comercios tradicionales, restaurantes, terrazas, etc. En Óbidos parece que se para el tiempo, pero, antes de que llegue la noche, regresaremos a Lisboa para alojarnos y cenar en nuestro hotel.

Día 7: Lisboa - Estoril - Cascais - Sintra – Lisboa. Un gran recorrido por Lisboa y sus alrededores

Una jornada más para disfrutar en todo momento de una ruta por un país muy especial. En cuya capital saludaremos al nuevo día, que comenzaremos con una visita panorámica por la excepcional Lisboa. El Monasterio de los Jerónimos; la Torre de Belem (recomendable probar los pasteles de Belem); el impresionante Monumento a los Descubridores, volcado hacia el Duero; el Puente 25 de abril; las Plazas del Comercio, del Rossio y del Marqués de Pombal, etc.

Una inolvidable experiencia que se completará con la visita a la cercana Estoril (sede del célebre Casino), y a Cascáis, una pintoresca población de pescadores en la que destaca su centro histórico, su puerto deportivo y, como en Estoril, sus playas… Otro gran día en Portugal.

Otro de los lugares de imprescindible visita en Portugal es Sintra, en la falda de las montañas del mismo nombre y uno de los enclaves más bellos del país. Allí estaremos, después de nuestro sugerente recorrido por Lisboa, Estoril y Cascais y podremos visitar el Palacio Nacional, Patrimonio de la Humanidad y muy original ya que su construcción, en origen, fue árabe, para adaptarse al estilo autóctono manuelino en el siglo XV.

Y tendremos unas horas para disfrutar de la ciudad y su entorno, antes de volver a Lisboa, donde tendremos la opción de una cena que nos permitirá conocer el folclore portugués, con el fado como bandera, además de una cena. El día terminará en nuestro hotel, donde descansaremos de cara a nuestras jornadas en Madeira.

Día 8: Lisboa – Funchal. Destino Funchal, Madeira nos espera

Mientras desayunamos, nos preparamos para iniciar la recta final de este fascinante viaje por Portugal, con la isla de Madeira, la principal isla del archipiélago del mismo nombre, como referencia, muy cerca de la costa noroeste de África. Todo un cambio de latitud que completa los atractivos de este viaje.

Nos trasladarán al aeropuerto para despegar hacia Funchal, la capital isleña, cuyo aeropuerto lleva el nombre de la estrella del fútbol Cristiano Ronaldo, nacido allí. Ya en nuestro hotel, podremos dejar el equipaje antes de disfrutar de tiempo libre el resto del día.

Antes de regresar al hotel para dormir, podremos empezar a conocer esta célebre isla, uno de los destinos europeos más apreciados por su espectacular belleza natural.

Como curiosidad (y especialmente recomendado a sus seguidores), se puede visitar el Museu CR7 dedicado a Cristiano Ronaldo. O, como prólogo a lo organizado para la siguiente jornada, pasear por la ciudad, degustar algunos de sabores típicos de Madeira (probar alguna sopa, como la ‘caldeirada’ de pescado o degustar un vino de la tierra), hacer unas compras…

Día 9: Funchal - Excursión A Porto Moniz – Funchal. Una deliciosa jornada en Madeira

Un buen desayuno puede ser el comienzo de otro gran día en Portugal, durante el que realizaremos una excursión de día completo, con almuerzo incluido, a Porto Moniz. Nuestro camino nos llevará por la Costa Sudoeste, con localidades como Ribeira Brava, a solo 15 kilómetros de Funchal, en la que podremos ver la Iglesia de São Bento, el Ayuntamiento, etc.

Ponta do Sol y Madalena do Mar serán otras paradas en la ruta, durante la cual podremos ver las populares plantaciones bananeras al pasar por Loreto en dirección al Paul da Serra. Una vez en Porto Moniz, disfrutaremos de la calma y de la belleza de esta zona madeirense, con espectaculares piscinas naturales creadas por la secular actividad volcánica.

Después de almorzar, continuaremos por la Costa Norte, con destacados puntos en nuestro periplo como Sixal y San Vicente, además de Laurissilva, hasta llegar a Encumeada, con un impresionante mirador al mar y al sur de la isla. De vuelta a Funchal, podremos comprobar en primera persona la gran belleza del Cabo Girao, considerado como el promontorio más alto de Europa. Ya en Funchal, nos alojaremos para descansar ante la siguiente jornada.

Día 10: Funchal. Jornada libre para conocer la capital de Madeira

Todo un día libre en la capital de Madeira, en el que se podrán realizar excursiones opcionales para seguir conociendo la isla, con todo tipo de oportunidades para disfrutar de la naturaleza, del encanto de sus pueblos, de su rica gastronomía.

Se puede empezar, por ejemplo, por un paseo por el Jardín Panorámico, en el centro de la ciudad y con una excepcional vista del Atlántico, o visitar algunas de sus célebres bodegas (sus vinos se elaboran con una treintena de uvas diferentes), antes de almorzar en cualquiera de los numerosos restaurantes o tabernas.

Ya por la tarde, podremos visitar la zona de la Catedral de la Sé, con cinco siglos de historia; pasear por las coloristas calles de la Zona Vieja; subir al monte donde se encuentra el Jardín Botánico (con un inolvidable trayecto de 15 minutos desde el centro hasta la parte más alta)… en todo caso, merece la pena disfrutar de la caída de la tarde en cualquiera de los excepcionales miradores de la ciudad.

Una experiencia para el recuerdo, después de la cual regresaremos al hotel, para preparar las maletas de cara a la partida y pasar la noche. Ya queda menos…

Día 11: Funchal – España. ¡Hasta la vista, Portugal!

Saborearemos nuestro último desayuno (hasta el momento) en Funchal, en Portugal, recordando todo lo vivido durante esta semana y media de viaje por tierras lusas, y con tiempo libre hasta que llegue la hora de que nos trasladen al aeropuerto. Tiempo para respirar el aire puro de Madeira, de asomarnos al impresionante balcón atlántico, de degustar algún dulce local o un aperitivo enriquecido con un vino de Madeira… Desde que aterrizamos en Lisboa, habremos disfrutado cada minuto, que de eso se trata cuando planificamos un gran viaje.

Naturaleza e Historia de cinco estrellas, tradiciones y costumbres especiales, sabores y colores de todo tipo, una población hospitalaria… todos los elementos para considerar un viaje como excelente, como una experiencia a recordar, han confluido en estos días de pleno contacto con el país portugués. Mientras nos trasladen al aeropuerto, recordaremos los gratos momentos vividos en distintas parajes de este bello lugar en el mundo, desde el que volvemos a nuestra casa. ¡Obrigado, Portugal!