Viaje a Noruega: Circuito Cabo Norte, Laponia y Fiordos

Día 1: España - Rovaniemi. Hacia un lugar mágico

En cuanto tengamos todas nuestras cosas listas y comprobado que no olvidaos nada, saldremos camino del aeropuerto para dar comienzo a esta nueva aventura viajera por tierras del norte de Europa. Llegaremos al aeropuerto al menos dos horas antes de la hora prevista para la salida de nuestro vuelo a Rovaniemi, en Finlandia, un lugar mágico en el que nos sentiremos trasladados a un sitio de fantasía y en el que podremos visitar, incluso, la casa de Papá Noel.

Cuando aterricemos en nuestro destino y hayamos recogido nuestro equipaje, alguien nos estará esperando para darnos la bienvenida y acompañarnos al hotel, donde, después de registrarnos, será el momento de cenar y retirarnos a nuestras habitaciones a descansar y prepararnos para todo los que nos espera en este viaje.

Día 2: Rovaniemi - Karasjok. Papá Noel será nuestro anfitrión

Cuando terminemos de desayunar, por la mañana, iremos a visitar la casa de Papá Noel, en el centro del Círculo Polar, donde conoceremos a Papá Noel y a todos los que le ayudan, sobre todo en las fiestas de Navidad. Y no solo eso, también podremos ir a la oficina de correos para depositar nuestras cartas con nuestras peticiones y montar en los renos. Toda una aventura inolvidable. Comprobaremos que en este lugar la Navidad no es solo en el mes de diciembre, sino que durante todo el año se respira ese ambiente mágico.

Después, seguiremos nuestro camino hasta Karasjok, en Noruega, capital política del pueblo sami, un pueblo indígena que mantiene vivas sus tradiciones, aunque, hoy en día, ningún sami vive, completamente de acuerdo con esas tradiciones, que pasan de generación en generación. En Karasjok merece especial atención, sobre todo, el parlamento sami de Noruega, un edificio verdaderamente innovador en cuanto a su arquitectura y en cuya biblioteca se guarda, sin duda, la literatura en lengua sami más completa de todo el mundo.

En Karasjok visitaremos el parque temático Sapmi, donde podremos visitar casas tradicionales del pueblo sami y conocer su modo de vida y su historia.

Terminado el día, iremos al hotel, cenaremos y nos dispondremos a pasar una merecida noche de descanso.

Día 3: Karasjok - Cabo Norte. El extremo norte de Europa nos espera

Después de desayunar, saldremos hacia Cabo Norte. Bordearemos el fiordo de Porsangen, el cuarto fiordo noruego, de más de cien kilómetros de longitud. Cruzaremos los más de siete kilómetros del túnel submarino que une Noruega continental con isla Mageroya, un lugar con un paisaje desolado, totalmente falto de árboles, debido a su situación en el extremo norte del continente europeo y con elevados acantilados de cara al mar. Cuando lleguemos, visitaremos, (con entrada y bebida incluidas), el Ártico Ice Bar, el primer bar construido de hielo en Noruega, donde tendremos oportunidad de conocer el hielo en estado puro, tocarlo y ver los distintos tipos de hielo, sus tonalidades y texturas, así como admirar la maravilla del invierno en el Ártico, (la noche polar y las auroras boreales). Sin duda, toda una experiencia.

Continuaremos al hotel, cenaremos y, después, iremos a Cabo Norte, incluyendo la entrada a la gigantesca plataforma sobre la que se haya el monumento a la bola del mundo que señala el Norte y que, sin duda, será una experiencia inolvidable y donde recibiremos el certificado que acredita nuestra estancia en este lugar único.

Regresaremos al hotel y pasaremos una tranquila noche de descanso.

Día 4: Cabo Norte - Alta. Pinturas rupestres y auroras boreales

Cuando terminemos nuestro desayuno, tendremos tiempo libre hasta el momento de emprender camino hacia Alta. Sin embargo, si queremos, tendremos la oportunidad de hacer una excursión opcional en barco para visitar la isla de los Pájaros, una de las reservas de aves marinas más importantes de las regiones subárticas, donde anidan millones de aves, como, por ejemplo, frailecillos, gaviotas tridáctilas, cormoranes y águilas marinas.

Hagamos la excursión o no la hagamos, a la hora indicada nos dirigiremos hacia el túnel submarino del fiordo de Kobp, y continuaremos hacia Alta, donde podremos experimentar la cultura sami y admirar grabados rupestres, (entre 6500 y 2500 años de antigüedad) que son Patrimonio de la Humanidad. En Alta destaca su museo de petroglifos. La región de Alta nos ofrece mesetas montañosas, paisajes costeros, bosques y un montón de posibilidades de practicar deportes al aire libre, como ciclismo, pesca o senderismo.

Cenaremos y pasaremos la noche en Alta.

Día 5: Alta- Fiordos de Lyngen y Ulls - Tromso. Hacia Tromsø, donde naturaleza y cultura van de la mano

Cuando terminemos de desayunar, dejaremos Alta para dirigirnos hacia Tromsø. En nuestro camino, bordearemos los fiordos de Kvænan y Resta y atravesaremos, en barco los de Lyngen y Ulls. Cuando lleguemos a nuestro destino, haremos una visita panorámica de la ciudad, el lugar ideal para contemplar auroras boreales. Tromsø, situada en una isla entre dos fiordos, es una ciudad moderna que, entre otras cosas interesantes, cuenta con el jardín botánico situado más al norte del mundo. Además, la ciudad es conocida por tener una animada vida nocturna y por sus restaurantes, especializados en ofrecer al cliente ingredientes frescos del Ártico.

Durante nuestra visita panorámica, conoceremos los muelles, con las casitas tradicionales noruegas; la iglesia de madera de Nuestra Señora de Tromsø, una pequeña catedral católica; la catedral ártica de Tromsdalen, que en realidad no es la catedral, sino una espectacular iglesia parroquial. Subiremos, en el teleférico Fjellheisen, a la plataforma suspendida que nos impresionará con una vista increíble y única de la ciudad, un paisaje que parece sacado de una película.

Terminado el día, iremos al hotel donde cenaremos y pasaremos la noche.

Día 6: Tromso - Islas Lofoten - Vesteralen (opcional ballenas gigantes). Paisajes árticos, ballenas, renos y vikingos

Después de desayunar, saldremos hacia las islas Lofoten-Vesteralen, donde podremos admirar algunos de los paisajes más hermosos de Europa: magníficas y majestuosas montañas, cantidad de playas solitarias y típicos pueblos marineros con cabañas rojas y amarillas junto a los secaderos de bacalao. Además, esta zona nos ofrece fabulosas rutas para practicar senderismo, posibilidad de navegar en kayak, o cenar, bajo la luz del sol de medianoche, unos tacos de salmón, acompañados de una cerveza artesanal bien fría.

Al llegar, tendremos tiempo libre para explorar la zona a nuestro aire. No obstante, si queremos, se nos ofrece la posibilidad opcional de hacer una excursión para ver ballenas gigantes. En caso de no poder verlas, se nos devolverá parte del importe de la actividad.

Después, continuaremos hasta llegar al hotel en el que pasaremos la noche.

Día 7: Islas Lofoten - Vesteralen (opcional Islas Lofoten y fiordo Troll). Una fantástica experiencia de paisajes y naturaleza

Después de desayunar, tendremos todo el día libre o, si lo preferimos, podremos hacer una excursión opcional por las islas Lofoten, que nos permitirá seguir descubriendo los fantásticos paisajes naturales de esta parte del norte de Europa. En nuestra excursión, conoceremos algunos pueblos típicos de la zona, como, por ejemplo, Kavelgäg, fundado, a principios del siglo XII, con el nombre de Vågan, por el rey Oystein Magnusson, que construyó, en el lugar que hoy ocupa el pueblo, un albergue de pescadores y una iglesia. En Kavelgäg podremos ver su iglesia de madera amarilla del siglo XIX. Además, se nos ofrece la posibilidad de realizar un crucero opcional por el Trollfjord, (fiordo Troll), entre las islas Lofoten y el archipiélago de Vesteralen, al que accederemos a través de una estrecha entrada de origen glaciar, uno de los lugares más impresionantes de los países escandinavos, un sitio verdaderamente exótico y espectacular, rodeado de montañas y famoso por sus esfuerzos para mantener las antiguas tradiciones pesqueras.

Independientemente de la opción que hayamos elegido, al final del día iremos al hotel a cenar y pasar una tranquila noche de merecido descanso.

Día 8: Islas Lofoten - Vesteralen- Oslo. Una ciudad en medio de la naturaleza

Cuando terminemos de desayunar, nos trasladaremos al aeropuerto para tomar un vuelo que nos llevará a Oslo, la capital de Noruega. Al llegar, iremos al hotel y, una vez debidamente registrados y después de dejar nuestras cosas en la habitación, tendremos tiempo libre para explorar la capital. Oslo, situada entre un fiordo y hermosas colinas, es una capital moderna con muchas cosas que ofrecer al visitante: museos, centros comerciales, restaurantes… Su centro urbano se puede recorrer, fácilmente, tanto a pie, como en bicicleta o usando su red de transporte público. Durante todo el año, en Oslo, podemos asistir a representaciones teatrales, ballet u ópera, así como conciertos de música en vivo. Durante 2009, Oslo ha ostentado el título de “Capital verde europea”.

Terminado el día, será hora de regresar al hotel en el que pasaremos la noche.

Día 9: Oslo- Alesund. Hacia una ciudad de festivales

Después de desayunar, saldremos del hotel camino de la costa. Lo primero que haremos será bordear el lago Mjøsa, situado en una zona agrícola, cuyos primeros asentamientos datan de la época de los vikingos. El lago es uno de los más profundos de Europa y el mayor de Noruega, con más de cien kilómetros de longitud. A continuación, pasaremos por el valle de Gudbransdal, una región salpicada de pueblos con viejas granjas que conservan su arquitectura tradicional, y todo ello rodeado de unos paisajes y una naturaleza difíciles de imaginar.

Llegaremos a Alesund, una ciudad que supone una referencia del modernismo en Europa, ya que fue reconstruida a principios del siglo XX después de sufrir un devastador incendio. Alesund merece, sin duda, una visita, tanto por su situación entre islas y por ser el punto de acceso para admirar uno de los fiordos más espectaculares de Noruega, el Geiranger, como por su casco antiguo, con edificios art Nouveau. Puede ser una buena idea subir al mirador, conocido como Fjellstua, en el monte Aksla, desde el que tendremos las mejores vistas de la ciudad.

Al finalizar el día, iremos al hotel en el que cenaremos y pasaremos la noche.

Día 10: Alesund - Crucero por el Geiranger- Región de los Fiordos. Fiordos, montañas y cascadas

Cuando terminemos de desayunar, haremos un pequeño crucero por el Storfjord, un fiordo de más de cien kilómetros, uno de los más largos de Noruega. Realizaremos un crucero por el fiordo Geiranger, que forma parte de los lugares Patrimonio de la Humanidad y no sin razón. Es un sitio espectacular como pocos, rodeado de montañas de hasta mil metros de altura de las que se descuelgan preciosas cascadas. Algunas de las cascadas llevan el nombre de la figura que forman, como, por ejemplo, la cascada de las siete hermanas, la cascada de la botella, o la del velo nupcial, llamada así porque cae sobre un borde rocoso, y cuando el sol la ilumina desde atrás, tiene el aspecto de un fino velo de novia. Las laderas de las montañas que rodean el glaciar, están salpicadas de granjas aisladas.

Después de desembarcar, seguiremos hacia el glaciar de Briksdal, que es, en realidad un brazo del glaciar de Jostedal, el más grande de Europa. El Briksdal se encuentra en el Parque Nacional de Jostedalsbreen, un lugar realmente increíble, con unos paisajes preciosos, lleno de senderos. Después del almuerzo, llevaremos a cabo una preciosa ruta, que nos llevará, entre montañas y cascadas, hasta la espectacular lengua del glaciar (Un consejo: tenemos que llevar calzado adecuado). Esta caminata durará varias horas, pero estamos seguros que será una experiencia inolvidable.

Cuando terminemos esta fantástica aventura, iremos al hotel de la zona de los fiordos donde cenaremos y pasaremos la noche.

Día 11: Región de los Fiordos - Sognefjord-Bergen. Hacia una ciudad tan antigua como los vikingos

Cuando terminemos de desayunar, daremos un paseo en barco por el fiordo de los Sueños, (el Sognefjord), el fiordo más profundo de Noruega que llega a tener hasta mil trescientos metros de profundidad y que, además, es el de mayor longitud, con doscientos kilómetros de largo.

Desembarcaremos en Gudvangen, un pequeño pueblo que, en sus orígenes, fue un asentamiento vikingo. Seguiremos nuestro camino, pasando por el valle de Voss, un lugar mágico de montañas, bosques, ríos, lagos y cascadas. Llegaremos a Bergen, segunda ciudad de Noruega por número de habitantes, de los que, aproximadamente, el diez por ciento son estudiantes, lo que da a la ciudad un ambiente alegre y lleno de vida, una ciudad de casi mil años de historia, ligada a los vikingos.

Después de almorzar, disfrutaremos de una visita panorámica en la que conoceremos, entre otros lugares, el viejo puerto, (el Bryggen), un lugar ya importante desde hace siglos; o el antiguo barrio de los comerciantes de la Liga Hanseática, declarado Patrimonio de la Humanidad, con sus casas de madera pintadas de diferentes colores y sus interiores torcidos. Subiremos, a bordo de un funicular, a la colina Floyfjellet para admirar el hermoso paisaje de la ciudad y del fiordo.

Terminada la visita de la ciudad, iremos al hotel, cenaremos y nos dispondremos a pasar una tranquila noche de merecido descanso.

Día 12: Bergen- Stavanger. La ciudad de las casas blancas

Cuando terminemos de desayunar, tendremos la mañana libre o, si lo preferimos, podremos hacer una visita opcional a la casa de Edvard Grieg, nacido en Bergen en 1843. La casa de Grieg es un bonito edificio típico del siglo XIX, situada en un entorno natural único. Junto a la casa, con vistas al lago Nordås, el compositor mandó construir una especie de cabaña donde componía. En el salón de la casa aún se conserva su piano, que todavía se utiliza en ocasiones señaladas. También podremos visitar la Gamla Bergen, una especie de museo al aire libre, que consta de unas cuarenta casas tradicionales de los siglos XVIII y XIX y que se han traído a este lugar desde todo Noruega.

Después del almuerzo, saldremos por la “Ruta Atlántica” hacia Stavanger, famosa, principalmente, por ser de donde salen las excursiones para subir al Preikestolen, (el Púlpito), uno de los miradores más imponentes del mundo, pero Stavanger tiene mucho más que ofrecer: museos, gastronomía, o sus barrios de casas de madera blanca.

En nuestro camino, atravesaremos, a borde de un ferry, los fiordos de Bjöna y Bokna, las islas verdes del archipiélago Rennesoy, con muchas granjas, segundas residencias y silencio, mucho silencio y pasaremos por los túneles submarinos del Rennfast de varios kilómetros de longitud.

Cuando lleguemos a nuestro destino, la ciudad de Stavanger, iremos al hotel a cenar y retirarnos a descansar.

Día 13: Stavenger (opcional al Fiordo de Lyse y Prekestolen). Al borde del abismo

Cuando terminemos de desayunar, tendremos todo el día libre para organizarlo como prefiramos, desde dedicarlo a descansar, hasta pasear por Stavanger, con un centro muy animado lleno de bares y terrazas y descubrir sus rincones o salir de compras. Una buena idea es movernos por la “ruta de los grafitis”, el llamado Nuart, la muestra de arte callejero más importante del mundo.

Sin embargo, si queremos podremos realizar, opcionalmente, la excursión más famosa de los fiordos: daremos un paseo en barco por el fiordo de Lyse, (fiordo claro), uno de los más pequeños, pero rodeado de un paisaje impresionante y unas formaciones rocosas verdaderamente imponentes. Después, continuaremos con la subida al Preikestolen, para lo que será imprescindible llevar calzado adecuado para andar por la montaña, estar en una buena forma física y, desde luego, que las condiciones meteorológicas sean favorables. El Preikestolen, (el Púlpito), una meseta rocosa espectacular que se yergue más de seiscientos metros sobre la superficie del fiordo y que es, sin duda, uno de los puntos clave de Noruega, es un lugar que, no solo no defrauda, sino que, cuando lleguemos hasta él sentiremos que hemos vivido una experiencia inolvidable.

Con el espectáculo del Preikestolen todavía clavado en nuestros ojos, regresaremos a Stavanger y tendremos el resto de la tarde libre hasta que sea la hora de volver al hotel, cenar y retirarnos a nuestras habitaciones para disfrutar de una merecida noche de descanso.

Día 14: Stavanger - Oslo. La magnífica costa noruega

Cuando terminemos de desayunar, dejaremos atrás la ciudad de Stavanger para dirigirnos, por el hermoso sur de Noruega, hacia Oslo, atravesando impresionantes paisajes. Almorzaremos por el camino y, cuando lleguemos a la capital noruega, haremos una visita panorámica de la ciudad para conocer los lugares más emblemáticos de la capital del país.

Conoceremos, entre otros lugares, el parque Frogner, el más grande de Oslo, un parque muy bien cuidado, con muchas zonas verdes, flores y un lago. En el centro, está el llamado parque Vigeland en el que podemos ver unas doscientas esculturas, hechas en granito y bronce, por Gustav Vigeland, representando personas de ambos sexos, de distintas edades y en distintas posiciones.

Veremos, así mismo, la calle Karl Johans, la más importante de Oslo, una calle con una gran concentración de hermosos edificios, jardines llenos de flores, fuentes y tramos peatonales. Conoceremos también el Palacio Real, uno de los monumentos más emblemáticos de la capital y lugar de residencia de la familia real noruega. Y veremos el Parlamento, (Storting), de mediados del siglo XIX, un edificio muy característico de color amarillento.

Cuando concluya nuestra visita, iremos al hotel, cenaremos y nos retiraremos a pasar nuestra última noche en Noruega.

Día 15: Oslo - España. Decimos adiós a los fiordos

Cuando terminemos de tomar nuestro último desayuno en Noruega, tendremos algo de tiempo libre hasta que sea la hora prevista para que nos recojan y nos lleven al aeropuerto para volver a España. Seguro que no olvidaremos nunca todo lo que hemos visto a lo largo de estas dos semanas en las que hemos recorrido parte del territorio de estos dos hermosos países del norte de Europa. Seguramente nos vamos con una cierta nostalgia, pero, al mismo tiempo, con ganas de llegar a casa para contar a amigos y familiares las maravillas que hemos podido contemplar y para animarlos a que lo vean con sus propios ojos. Por nuestra parte, cuando lleguemos a España, habrán concluido nuestros servicios, pero estamos seguros de volvernos a encontrar muy pronto en cualquier otra parte del mundo. ¡Hasta entonces!