Día 2: Atenas. Un museo al aire libre
Transporte
Autocar, minibús o van
Visitas
Acrópolis con entrada
Panorámica de Atenas
Primer día que amanecemos en Grecia. La ilusión por explorar lo mejor de Atenas nos invade, pero lo primero es lo primero: hay que cargar bien las pilas con el desayuno que nos brinda el hotel.
A continuación, nos espera una apasionante visita panorámica por la capital. La plaza Sintagma será la encargada de abrir este tour lleno de historia y cultura. Y presidiendo esta plaza, también conocida como de la Constitución, se encuentra el Parlamento. Destaca, justo enfrente, la Tumba del Soldado Desconocido, especialmente por la noche cuando es custodiada por los “Evzoni”. Con un poco de suerte llegaremos a tiempo de ver la ceremonia del cambio de guardia… Después, nos acercaremos hasta la avenida Panepistimiou, donde encontraremos la Biblioteca Nacional, de estilo neoclásico, así como la Universidad y la Academia.
El plato fuerte de la jornada llegará con nuestra entrada en la Acrópolis. Desde lo alto de la colina, majestuosa, vigila la ciudad. Lugar de culto y defensa en la antigua Grecia, conoceremos, entre otras maravillas, el Partenón y los templos del Erecteion, con su famoso pórtico de las Cariátides, y de Atenea Niké.
Por la tarde tendremos tiempo libre, así que podremos pasear tranquilamente por lugares como el barrio de Plaka, el Museo de la Acrópolis, o las calles de la zona llamada Monastiraki, que alberga el Templo de Hefestión y que puede presumir de ser uno de los barrios más animados de Atenas. Al final del día, volveremos a nuestro hotel para ponernos cómodos y disponernos a pasar la noche.