Día 1: Punto de origen – Aeropuerto CYL – Zadar MP. Aterrizando en Croacia.
Hoy es un día de descubrimientos y primeras veces. Pondremos rumbo a Croacia con la intención de no perdernos ninguno de sus tesoros arquitectónicos y paisajísticos. Sin duda será toda una experiencia que empezará nada más tocar tierra croata.
Nos estarán esperando en el mismo aeropuerto para trasladarnos al hotel de Zadar que nos acogerá en nuestra primera noche en el país. Tendremos tiempo para instalarnos, aunque estaremos deseosos de salir a conocer esta imponente ciudad que años atrás fue el centro administrativo de la Dalmacia Bizantina.
Una importancia singular, aunque el origen fundacional se remonta centenares de años antes y alcanzó su máximo esplendor bajo el mandato del Imperio Romano. Buena prueba de ello son los restos del foro romano que yacen en esta localidad, considerados los mejor conservados de toda la República.
En el mismo foro se levantan dos construcciones religiosas de épocas posteriores que guardan una belleza única amplificada por el entorno donde se enmarcan. Estamos hablando de la Iglesia de San Donato, del siglo XI, con una planta circular situada bajo la bellísima cúpula del lugar sagrado, y de la Iglesia de Santa María, ubicada en un antiguo monasterio benedictino del siglo XII.
La ruta guiada nos llevará, posteriormente, hacia el paseo marítimo de Zadar. La bucólica postal de la ciudad no sería completa sin el azul de fondo del mar Adriático. Podemos realizar una buena caminata en el paseo marítimo de esta ciudad hasta llegar al punto que recoge todos los elogios de la localidad: el Órgano de Mar. Debajo del paseo y de las escalinatas se esconden unos tubos de diferentes tamaños como los propios de los órganos de las iglesias. Estos tubos aprovechan el viento y el oleaje del mar para emitir distintos sonidos regidos por las bondades o inclemencias del tiempo, que envuelven el visitante en un aura de relax y confort casi mágicos.
Según dicen los locales, este es el mejor punto de todo el país para apreciar la más bella puesta de sol croata. Con el valor añadido de la música del órgano, estaremos seguros que hemos elegido el mejor destino posible para pasar nuestras vacaciones. ¡Y esto sólo acaba de empezar!