Día 7: Sofía. Una capital con aires soviéticos
RÉGIMEN
Desayuno. Almuerzo. Cena
Transporte
Autocar, minibús o van
Visitas
Panorámica de Sofía
Cuando terminemos de desayunar, será el momento de disfrutar de una visita panorámica de la capital. Sofia, la ciudad más grande de Bulgaria, su capital y una de las ciudades más antiguas de Europa, es una ciudad que vale la pena disfrutar con calma para poder conocer, no solo sus monumentos, sino, también, su rica gastronomía.
En nuestra visita, conoceremos los lugares más representativos de esta ciudad: la plaza Sveta Nedelia, el centro de Sofia y lugar donde está la catedral; la iglesia-Rotonda de San Jorge, el monumento más antiguo y mejor conservado de la época romana de Sofía; el Teatro Nacional Iván Vazov, de estilo neoclásico, uno de los principales centros culturales de la capital, y que lleva el nombre de uno de los mejores escritores en lengua búlgara; la plaza Alejandro Batenberg, en el centro de la ciudad, con el Palacio Real, parecido a un castillo y que ahora alberga la Galería Nacional de Arte y el museo de Etnografía. En esta plaza se encuentra, también, la iglesia de san Nicolás. Veremos la catedral de Alejandro Nevski, el principal centro religioso de Sofia y, sin lugar a dudas, uno de sus edificios más emblemáticos, con sus inconfundibles cúpulas doradas. Y veremos la antigua basílica de Santa Sofia, que da nombre a la ciudad y es la iglesia más antigua de la capital de Bulgaria.
Después de almorzar, tendremos la tarde libre y, si lo deseamos, podremos visitar, opcionalmente, el Museo Nacional de Historia y la iglesia de Boyana, Patrimonio de la Humanidad, uno de los pocos monumentos de arte cristiano medieval que han llegado hasta nuestros días.
Al finalizar el día, iremos a nuestro hotel para cenar y pasar una merecida noche de descanso.