Día 3: Innsbruck – Lago Achensee – Innsbruck. A los pies de los Alpes
RÉGIMEN
Desayuno, almuerzo y cena
Transporte
Autocar, minibús o vanTren a VaporFerry
Visitas
Panorámica de Innsbruck
Pintura Circular Gigante Innsbruck
Tras el desayuno, saldremos hacia el lago Achensee, el mayor lago natural del Tirol. Allí disfrutaremos de un recorrido nostálgico en un tren de vapor antiguo que nos adentrará en plena naturaleza.
Almorzaremos en las inmediaciones del lago, disfrutando de la comida y de los bellos paisajes y, ya por la tarde, culminaremos nuestra visita haciendo un crucero por las plácidas aguas del lago Achensee. Cuenta con una superficie de 6,8 kilómetros cuadrados, una temperatura media de 19 grados y un color verde esmeralda que siempre sorprende al viajero.
Después de esta bella panorámica, regresaremos a Innsbruck y, a nuestra llegada, realizaremos una visita panorámica por la capital del Tirol. La ciudad, que existe desde el año 1180, se asienta en el valle del Inn, encajonada entre la cadena alpina al norte y las montañas Tuxer al sur.
Recorreremos los lugares más significativos de la ciudad, como la Abadía de Wilten o la Maria-Theressian Strasse, donde se erige la Columna de Santa Ana que conmemora la retirada de los bávaros en su ataque de 1703. Mención especial merece el Tejadito de Oro, en la plaza de la ciudad, con 2.657 baldosas de cobre dorado que relucen sobre el mirador de una ventana gótica del año 1.500. Nos acercaremos también al museo Tirol Panorama, donde nos sorprenderá la Pintura Gigantesca Circular, una pintura de 360 grados y 10 metros de alto que representa la lucha por la libertad del Tirol.
A última hora del día tendremos la oportunidad de contratar una actividad opcional muy divertida e interesante. Consiste en asistir a un espectáculo de música y bailes típicos del Tirol, un plan perfecto para profundizar en el conocimiento del folclore austriaco. Y por fin, después de toda una jornada descubriendo los tesoros que guarda este bello país, nos retiraremos a descansar en el hotel.