El mundo árabe está muy acostumbrado a este tipo de tatuajes, que suelen ser tradicionales en muchas de las culturas locales, y llaman la atención de los europeos que ven el ritual de la henna como algo bonito a la par que identificativo. Por eso será una buena oportunidad para hacernos el tatuaje de nuestros sueños.
La henna es una coloración vegetal cuyas tonalidades se mueven entre el color ocre y el caoba, y suelen ser usados para teñir cabellos y distintas partes del cuerpo, mayoritariamente manos y pies. La henna no penetra en la piel, por eso no es necesario usar ningún tipo de aguja para realizar esta clase de tatuajes, que, al cabo de unos días, empieza a desaparecer. A modo de consejo, cabe decir que la henna nunca es negra, solamente se torna de este color cuando se le añade un producto que puede provocar alergias y que está prohibido su uso a día de hoy en España y otros países. ¡Informaos bien de quién os va a dibujar la piel y de cómo lo va a hacer!
