Decimos Italia por recoger en una sola palabra el conjunto de tradiciones de un país con fronteras culturales muy difusas.
Y es que, desde el norte hasta el sur, el país de la bota tiene tradiciones y costumbres tan diferentes que parecen de países distintos, incluso entre pueblos de la misma región.
Pero dentro de este intenso amalgama existen una serie de costumbres y tradiciones comunes en el país mediterráneo por excelencia.
Por ello, hoy en Iberojet te contamos algunas de las tradiciones que más nos llama la atención de un país que conocemos bien, pero nunca deja de sorprendernos.
Semana Santa y sus tradiciones ancestrales, las navidades y el calor de la familia, el colorido del Carnaval de Venecia...¿por dónde empezar?
Italia es un país con una rica etnografía donde el italiano es una lengua relativamente reciente, y hoy en día se siguen hablando diferentes dialectos.
Además de este aspecto cultural, su geografía ha propiciado el mestizaje en el norte con los países colindantes y en el sur la fuerza del mediterráneo se palpa en su cultura.
Así, encontrarás fiestas como el archiconocido Carnaval de Venecia, el carnaval más elegante del mundo, donde durante unos días la ciudad se inunda del color y el misterio del siglo XVII veneciano.
Además, Italia acoge otro tipo de celebraciones como la impresionante representación hípica con tintes medievales de Palo di Siena.
Otras celebraciones de origen pagano como La Giubiana recuerdan las tradiciones de antes de la cristianización del imperio romano.
De esta manera, los italianos se comprometen con sus fiestas más tradicionales para mantener las costumbres de su riqueza cultural.
Si decimos Italia, lo primero que se viene a la mente son los platos de Italia que por cierto, son mucho más variados que la famosa pasta o pizza,típica de las regiones del sur.
Unos platos que se disfrutan con la gente más allegada, para celebrar el modo de vida mediterráneo y fortalecer los lazos de la familia: una institución casi sagrada en Italia. Por ello, el ritual a la hora de comer: cocinar juntos para luego disfrutarlo en familia en parte del ADN italiano.
En cuanto a las diferencias en la gastronomía, por ejemplo, en el norte se emplea más la mantequilla, mientras que en el sur el aceite de oliva es más popular. La pasta también es diferente, así como los entrantes.
Así, en el norte disfrutan de sopas, polenta, pasta cocida o carne hervida en vino y mantequilla entre otros manjares como el queso parmesano o el vinagre de Módena.
A medida que bajamos el sur, la cocina incorpora ingredientes como el aceite de oliva, el pecorino, legumbres, embutidos o carnes como el conejo y el jabalí.
En el sur las verduras y el aceite de oliva son protagonistas; en esta región son puristas de la pizza y la pasta fresca.
Con un templo musical como el Teatro alla Scala de Milán, la ópera es una de las tantas exportaciones culturales de Italia.
Un estilo que tuvo sus comienzos allá por el año 1800 y hoy en día se corona como una de las joyas del arte que los italianos disfrutan en su tiempo libre.
Además de estas costumbres, no podríamos acabar sin mencionar el tradicional café italiano, donde siempre tiene apellido -caffé con panna, caffé ristreo...- y es imposible pedir café a secas.
Aunque el café sea pequeño y rápido, es un ritual imprescindible en el ritmo frenético del carácter italiano.
En definitiva, Italia reúne tradiciones en la vida diaria o en las festividades locales, para ofrecer un paisaje cultural único al viajero. Por todo ello y si quieres conocer mas, no te pierdas nuestra guía de viaje de Italia.
Como para perdérselo...¿Verdad?