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Cosas típicas de Japón

El lugar eterno por excelencia, sorprende al viajero por su fusión orgánica con la vida moderna que se cuela en uno de los países más enigmáticos del mundo.

Dormir en una posada tradicional japonesa sobre un tatami, disfrutar de la belleza inmóvil de un jardín zen, sorprenderse con los perfiles salvajes de su costa volcánica o darse un baño terminal para olvidar el estrés de la vida occidental. Son solo algunas de las cosas típicas de Japón de las que podrás disfrutar.

Las cosas más típicas de Japón

Templos y jardines, el alma de Japón

Más de 1.000 templos sirven como excusa para construir impresionantes jardines a su alrededor. Desde Kinkaku-ji, un exquisito pabellón cubierto de pan de oro hasta Shōren-in, sin decoración, que invita a la meditación.

Onsen, un rito imprescindible

Bañarse en aguas termales es todo un ritual en Japón, donde, se ha elevado a la categoría de terapia. Te recomendamos los de Kyūshū y Tōhoku...que se encuentran ocultos en las montañas.

Gastronomía Japonesa

Sin duda, una de las cosas típicas en Japón, es el concepto de alta gastronomía. Se puede encontrar incluso en un humilde puesto callejero de comida. Es tal la atención que ponen a cada uno de sus platos, ya sea una simple sopa, que es casi imposible comer mal en Japón.

Renacer de los cerezos

Un auténtico espectáculo para los cinco sentidos y toda una metáfora del renacer: el florecimiento de los cerezos o Hanami, un imprescindible en tu visita a Japón y una tradición muy arraigada en el país.

Bosques de Bambú, hogar de guerreros

Los tallos infinitos de bambú te harán sentir en la película la Casa de las dagas voladoras.

Templo Budista Oku-no-in en Kōya-san

La visita a este templo se convierte en una experiencia inolvidable, por mucho que te contemos tan solo podrás conocer lo que es este lugar a través de la experiencia: senderos interminables, piedras milenarias, meditar con los monjes o degustar la cocina budista vegetariana.

Daibutsu, el Gran Buda de Nara

Una impresionante figura de buda en bronce dorada de nada más y nada menos que 15 metros. Con estas dimensiones, no es de extrañar que se encuentre entre las mayores efigies de bronce del mundo.

Hiroshima, la curación del pasado

Con un pasado que se recuerda tan solo para curar y perdonar, la ciudad mira al futuro a través de sus museos, y parques dedicados a la meditación. Una visita más que recomendable y cuanto menos, sobrecogedora.

Sumo, un espectáculo sin parangón

Desde los rituales sagrados, hasta la lucha cuerpo a cuerpo, el sumo es un espectáculo que hay que ver, al menos, una vez en la vida.

Monte Fuji, la eterna inspiración

Pensar en Japón, es pensar en el perfil casi divino de un monte que ha marcado la filosofía y estética del país, a todos los niveles.

Castillos, la leyenda samurái

El pasado feudal de castillos como Himeji-jō o el castillo del Cuervo encierra historias de lealtad, samuráis y ninjas.

Fiestas tradicionales para sumergirse en el folclore

En Iberojet pensamos que una de las mejores maneras de sumergirse en un país es a través de sus fiestas tradicionales. Y en Japón no iba a ser menos: kimonos de color, santuarios móviles...en sus matsuri o fiestas locales que tienen lugar, sobre todo, en agosto.

¿A qué esperas para explorar la vida en Japón?

Si quieres conocer más curiosidades, recomendaciones de este mágico país, no te puedes perder nuestra guía de viaje de Japón

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